Valor
Como tantos argentinos, tenía dos "empleos", si es que pueden denominarse así a las actividades poco convencionales que acometía diariamente ese joven ambicioso y emprendedor. Era una época jorobada para ser veinteañero, pero a él nada lo amilanaba, por más que transitara por cornisas abismales.
Una mañana, él, que era tan detallista, se descuidó y la policía lo pescó in fraganti justo cuando con su banda robaba un domicilio particular. Corría el mes de febrero de 1976, todavía gobernaba el peronismo, pero ya corría veloz la cuenta regresiva hacia el comienzo del más mortífero golpe militar del siglo XX.
Al ser detenido y encarcelado por su "trabajo" matutino, debió sentirse de alguna manera afortunado. Si hubiese caído por su ocupación vespertina, tal vez lo hubiese liquidado la Triple A o, un poco más adelante, la represión castrense. Es que por la tarde el muchachito integraba, en la zona norte del Gran Buenos Aires, una célula de Montoneros. La suerte fue despareja con él más adelante: robó 23 bancos y 18 camiones blindados, y estuvo preso 33 años. El viejo guerrero de hampas tan diversos, Luis "el Gordo" Valor, disfruta hoy en libertad de su plácido retiro.