Necesitamos ajustarnos a la realidad
¿Por qué tenemos que cambiar? En estos días, mucha gente me hace esta pregunta y creo que merece que pensemos por qué hay que contestarla. El Gobierno venía bien, pero no respondió aún a las necesidades de la población, especialmente de aquellos que lo votaron. Es cierto que no hay alternativas, y por eso Mauricio Macri sacó el 42 % de los votos, pero ahora vienen los cuestionamientos.
La gran pregunta se refiere a los problemas que generan los nuevos datos, los nuevos cargos que se están haciendo al gobierno. ¿Por qué hay que establecer un patrón de comportamiento tan distinto al que ya teníamos hasta ahora?
Estamos soñando con cambios que no están ocurriendo, con modificaciones y con pequeños ajustes que, en su conjunto, no llegan a representar demasiado en el gasto total del gobierno nacional y provincial que, normalmente, era de alrededor del 30 % y que ahora está 15 puntos más arriba en función del PIB del país.
El salario real en dólares está en el nivel más alto jamás alcanzado, lo que no quiere decir que el poder de compra sea muy alto comparado con el pasado. El tipo de cambio se ubica por debajo de los valores esperados y no sabemos si este nivel podrá mantenerse mucho más. Comprar en Chile o en los países vecinos es un 30 %, en promedio, más bajo que en Argentina. ¿Cuánto tiempo más podremos mantener esto, de esta forma?
No creo que se pueda mantener mucho, pero para el BCRA eso puede ser muy duro de cambiar. Las Lebacs representan un 130 % de la base monetaria, es un número muy elevado en nuestra opinión, pero las autoridades de la entidad consideran que es viable. Tenemos unos u$s 30.000 millones que representan reservas y a ellos eso no les preocupa. Habría que ver lo que hace Hacienda, con las nuevas leyes, que fueron bastante diluidas en el Congreso. De todas maneras, hay que comprobar qué es lo que realmente van a aprobar.
¿Qué habría que hacer? Un golpe de timón muy fuerte para demostrar que se dispone de poder. Esto habría que conversarlo con los principales opositores, especialmente en el Congreso, los cuales deberían apoyarlo.
¿Cuál podría ser este golpe de timón? Hay varias alternativas, pero tienen que ponerse de acuerdo la mayoría en una o dos medidas, que podrían ser una reducción importante de los costos laborales patronales o una suba inmediata de los edad jubilatoria mínima para empezar a cobrar dichas jubilaciones.
¿Cuándo se tendría que tomar esta decisión? Desde las próximas semanas hasta fin de marzo de 2018. Si este golpe de timón no ocurre dentro de ese período, es muy difícil que después pueda lograrse algo creíble.
Esto ya le pasó a varios gobiernos anteriores, los cuales siempre consideraron que para ellos “había tiempo”, que no se requería llegar a medidas drásticas.
Ahora sí es el tiempo de adoptar medidas, las que van a tener que ser leídas como fuertes. Hasta ahora hemos tomado medidas orientadas en el sentido correcto, pero no hemos logrado convencer del todo a la gran mayoría. Es el momento de intentarlo.