Semana 13 de 2008
País Guiness. Puede alimentar a 400 millones y estuvo a punto de hambrear a 40 millones. País de fábula. Vino un adverbio y lo salvó. ¿Cómo fue que "les pido humildemente" no brotó antes de la Primera Boca? Galimatías social más torpe no hay en el planeta. Y es argentino. De este país (quien "al toque" corrija "se dice nuestro país", que lo pruebe) "seriola" nuestro. No lo merecemos. Ni lo hay. Aún no conseguimos hacer crecer la historia. Hay 198 gajos de Billiken . Una "previa" mezquina, salvaje, mercantil. La adulta no cuajó. Tal vez (placas tectónicas de Mayo 1810 tiemblan cada día más) la sucesiva adicción a lo falsario expulse por fin el gran Bolo Fecal y nazca en 2010 el país Vocal. Nuestro. Porque éste no es. ¿Qué mostraríamos si en el Bicentenario una Primera Junta resucitada pidiera ver cómo está lo que fundaron? Salvo magros relámpagos de intento patrio esto lo que siempre fue es un zoco de toma y daca. De Aduana altiva y provincia "en pata". Dicotomía que está en la base de la semana 13 (sic). Nada nuevo. Siempre revival. Encarnación Rosas (ahora casada con magnate petrolero). Mazorca, con Pérsico-D´Elía teorizando a cachiporra. Y la ristra de traiciones al esfuerzo obrero y campesino que recorre siglo y medio de almanaque. O de paisaje al tuntún. Pero no país pues esto es sólo espacio límbico, fetal. Sitio donde una población de párvulos monologa autista sumando a la demografía del mundo (salvo excepciones) casi 40 millones de ciudadanos sin hacer. "Odio a los blancos de Barrio Norte", blasfemó D´Elía, ex funcionario oficial (triple sic) y sin duda una de las figuras decisivas de la semana. La otra fue su contracara: De Angelis. Un "estanciero" sin diente, fogoso Espartaco entrerriano que habla con la claridad que les falta a senadores y diputados que se encerraron a orar quince días. O que el muy pronto chirolizado Lousteau, que campante adhirió a la picaresca del entorno y en medio de tamaño despelote fue a tomar sol a Brasil. ¿Total? Que quien se robó la semana fue el grosero ícono de la argentinidad con palo que violó hasta hacer "suya" la Plaza Matriz y sangró gente golpeando a troche moche. ¿Por qué? Porque (pasen el dato) no estamos en 2008. Lo hizo para alegrar al Restaurador de la Necesidad y la Urgencia. Se adueñó de la Plaza de Mayo porque cree que ella es de quien la okupe. Arengó "La Plaza es nuestra" cual héroe rojo de una revolución de Groucho Marx. Y a la vista de cosacos del Palacio inmóviles por úkase de zar, zarina y ristra de rasputines de la Rosada. Fuera de la ex casa constitucional, el nonato país puja entre dolores, ilusiones y temores por salir a luz. No lo dejan. O es López Rega. O es Massera. O es Gostanian. O es Moreno. Siempre el ténebre personaje tapón. Rosas se servía de un enano para humillar ministros que fallaban. Menem entre amigos hacía volantear con mantel gigante a un Alderete que sonreía con pavor. No faltaba cierta piedad: "No me lo vayan a romper". El discurrir diario de la mayoría de los argentinos tiene grandeza, sacrificio, solidaridad, tristeza, ternura, amor, empuje y sueños a granel. Pero no país. Aquí las "patrias" impiden la Patria. Latoso Cuento de la Buena Pipa adormece e impide conciencia y acción. Cada cuatro años (si no sopla el simún y lo acuartelan) soñamos hacer un país. ¿Que qué pasó estos días? Sólo un desperfecto. Se le saltó el eje a la rueda de la paciencia del campo y se pudrió todo. Lo de siempre. Halcones contra Gorriones ¿Humildemente? Pampa al garete. Gobierno tártaro.
The Twitter Press: 1) urgente (sic), falta sangre (sic) en el Hospital de Niños (sic) Garraham. Necesitan 60 dadores diarios (sic); 2) "Vamos a protestar hasta que los porteños salgan a cazar cuises" (un peón entrerriano); 3) "La falsa humildad es peor que el orgullo. Nos vamos al bombo" (Jane Banana, poeta); 4) dato posta: son 400.000 los argentinos que consumen cocaína; 5) pese a considerar la música de Leonard Cohen un antídoto contra la banalidad el príncipe Felipe insiste en seguir siendo Príncipe; 6) "Cuando entra el tragamonedas, entra el tragavidas" (Monseñor Casaretto); 7) en 15 días el país de las vacas perdió cinco millones de litros de leche.
"En cuanto a la política apoyo la pluralidad de posiciones. ¿Se podría organizar un partido de quienes no están seguros de tener razón? De haberlo, ese sería el mío." (Albert Camus)