Sentidos contrarios
Moscú, Rusia.- Lo universal de ciertos signos. Lo inevitablemente ajeno. Y el juego, permanente y fructífero, entre todo ello. Como en esta imagen, donde el encuadre anima un paradójico extrañamiento. Porque están las flechas, lo rectangular de la calle, el par de zapatillas indistinguible de cualquier otro en cualquier otra parte del mundo. Pero esto es Moscú , al menos hasta el domingo el centro del mundo, y algo del sentido último de la imagen se nos escapa. ¿Qué tipo de indicación, realmente, están dando las señales inscriptas sobre el pavimento? ¿Se dirigen a los autos? ¿Hablan a los peatones? Como sea, el decidido par de zapatillas parece avanzar en abierta dirección contraria. Como si las flechas indicaran el puro asfalto y el deseo de la marcha buscara, con calma pero presumiblemente sin pausa, alguna otra cosa.