Alberto Fernández, de Berlín a París: el pibe que remontaba barriletes, la piscina oculta y la riqueza nazi

PARIS.- Alberto Fernández tiene la sensación de que sus gestos para aplacar la interna con el kirchnerismo se desvanecen rápidamente por razones ajenas a su voluntad. En Alemania lamentó que sus advertencias a los funcionarios que deben avalar el nuevo esquema tarifario tuvieran más despliegue que las palabras de respaldo del canciller alemán Olaf Scholz. Pero en la segunda jornada de la gira por Europa, las calles de Berlín le dieron al Presidente un momento de distracción.

Ya había ocurrido la reunión con Scholz cuando Fernández abandonó el hotel De Rome donde se hospedó y cruzó la plaza antigua que se extiende junto a la Universidad Humboldt.

Cuando llegó a la avenida Unter der Linden, la más importante de la metrópoli alemana, Fernández se fotografió con turistas argentinos, que lo saludaron con sorpresa, lejos de las preocupaciones de Buenos Aires. Un joven con la camiseta de River lo fotografió y otro, más efusivo, lo estrechó en un abrazo. Amante del rock nacional al igual que el Presidente, llevaba una remera con la frase “y los chicos remontaban barriletes”, del tema Ala Delta, de Divididos. Con la puerta de Brandenburgo como remate excepcional de la avenida, el Presidente paseó un rato por los cafés que se extienden por el boulevard y luego regresó al hotel De Rome.

No llegó a la puerta de Brandenburgo, la monumental entrada a la ciudad que sobrevivió a los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.

El edificio donde Fernández se hospedó en Berlín fue alguna vez fue alguna vez la sede del Dresdner Bank.

En el subsuelo, dónde antes de convertirse en hotel funcionaba la bóveda que albergó parte de la riqueza de los nazis, ahora se extiende una lujosa piscina.

Varios pisos más arriba durmió el Presidente argentino, antes de partir este jueves rumbo a París, dónde tendrá una reunión bilateral con el presidente francés Emmanuel Macrón y, de nuevo, la guerra en Ucrania dominará la agenda.

La cita con su par francés está prevista para mañana. Hoy, Fernández recibirá una medalla de reconocimiento en la universidad de La Sorbona. Allí también compartirá un almuerzo con el rector y el comité académico y una recorrida por la casa de estudios.

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