Ansiedad oficial ante la visita de Anoop Singh
Con muchas ganas de que lleguen fondos, aunque con la incomodidad de quien sabe que no podrá exhibir todos los deberes hechos, el ministro del Interior, Rodolfo Gabrielli, recibirá hoy al jefe del Departamento de Operaciones Especiales del Fondo Monetario Internacional (FMI), el indio Anoop Singh.
A las 15.30, Gabrielli ofrecerá un cómodo sillón de su despacho en la planta baja de la Casa de Gobierno a Singh, que llegará a Balcarce 50 acompañado por el viceministro de Economía, Jorge Todesca. Inmediatamente, empezarán a hacer cuentas sobre el déficit de las provincias, el trago amargo que le toca beber a Gabrielli en su calidad de ministro del Interior.
Tal como lo publicaron los diarios locales, con los que Singh se encontró tan pronto como aterrizó en Ezeiza, ayer por la mañana, las provincias no han realizado el ajuste pactado con el Poder Ejecutivo nacional.
Entre insultos y cartelazos de grupos de izquierda que lo esperaban en el aeropuerto, Singh leyó en breves resúmenes al inglés los principales matutinos porteños algo que ya sabía: que el 80 por ciento del gasto de las provincias sigue destinándose al pago de sueldos y jubilaciones, y que sólo tres de las 24 jurisdicciones (incluida la Capital Federal) ratificaron el Pacto Fiscal firmado hace dos meses para que ajusten 3000 millones de pesos.
Hasta ahora, sólo la ciudad de Buenos Aires, Santiago del Estero y La Pampa le dieron un aval formal al acuerdo fiscal. Otras, como Formosa, afirman haber reducido gastos burocráticos en direcciones y protocolo, aunque no en la magnitud en la que se les pide. Pero no basta. Los 3000 millones de ajuste que reclama el FMI, de la mano de Singh, equivalen a casi el 10 por ciento del gasto total de las provincias.
Bonos en la mira
Además, el enviado del FMI exigirá la eliminación de bonos provinciales.
Más allá de que Singh tiene fama de duro, y de que no habla ni una palabra de español, ¿en qué idioma piensan explicarle Gabrielli y Todesca esos deberes sin hacer?, preguntó LA NACION a un colaborador del ministro del Interior. La fuente descontó que el diálogo será "calmo y cordial". Con la misma cautela respondió el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, ante una consulta de LA NACION.
-¿El Gobierno tiene todavía la expectativa de que llegue la ayuda del FMI en abril?
-Estamos avanzando en el proceso de negociaciones, cumpliendo con todo el proceso de condiciones previas, y esto está transcurriendo normalmente, de modo tal que es factible que en abril, tal cual el cronograma pautado, se pueda arribar al cumplimiento de las condiciones previas y en mayo podamos tener una acuerdo con el FMI.
Otro funcionario, de estrechísima confianza del Presidente, fue más cauteloso aún. "Nuestras expectativas son buenas. Pero ésta es una negociación clave, y no queremos decir ni una palabra de más."
-¿Cree que el país ya hizo todo lo que podía hacer para lograr el acuerdo?, preguntó LA NACION a la fuente oficial.
-Hemos hecho casi todo lo que se podía hacer.
-¿Fueron las provincias las responsables de ese "casi"?
-No, no sé quién fue.
-¿Cuándo llegará una respuesta del Fondo?
-Todo depende de ellos.
Cualquier rasgo de impaciencia se ocultó en la Capital. Pero la inquietud salió bastante más al Sur, en Chubut, de la mano de la primera dama, Hilda "Chiche" González de Duhalde. Allí, la primera dama dijo que "es imprescindible la ayuda que puedan brindarnos los organismos internacionales" (de lo que se informa por separado).
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