Boudou entre reyes: iría a la coronación de Máxima
El vicepresidente Amado Boudou se codeará con la nobleza europea en los próximos días. En los despachos de la Casa Rosada habían comentado como una certeza casi absoluta que la presidenta Cristina Kirchner no viajará a Holanda el 30 del mes actual para la ceremonia de coronación de los nuevos reyes de los Países Bajos, Guillermo y Máxima. Una enorme cantidad de versiones se tejieron acerca de los motivos reales del faltazo que pegaría la jefa del Estado a ese encuentro de la realeza. Se habló de un eventual peligro de embargo del avión Tango 01.
También se mencionó la posible crítica que recibiría Cristina Kirchner por sus diferencias con la Unión Europea. Además se habló del escaso feeling que existe desde hace tiempo entre la Presidenta y Máxima Zorrigueta, ahora princesa, hija de un ex funcionario del gobierno militar, históricamente criticado por la Casa Rosada. Por ese motivo el comentario unánime en los pasillos de Balcarce 50 es que la nobleza europea estará con Boudou, que será el máximo representará de la Argentina ante la ceremonia de coronación de la nueva reina Máxima. Algunos, en señal de broma y como para atenuar el impacto de la ausencia de la Presidenta en Holanda, dijeron en el Gobierno que "dos reinas no podían estar en la misma fiesta".
Quejas en vuelo: la ministra Giorgi pasó un mal momento
En medio de la lista de los funcionarios nacionales y de la Ciudad que se fueron de vacaciones el fin de semana largo previo a las inundaciones, otra ministra que también se tomó un descanso fue la titular de la cartera de Industria, Débora Giorgi. Insólitamente, viajó a Bariloche por la empresa LAN, la misma compañía a la que el Gobierno le quitó la semana pasada el uso de las mangas para el acceso a los aviones.
En medio de ese conflicto, la funcionaria partió a Bariloche el 28 de marzo y regresó el 1° de abril acompañada de dos personas. Según el testimonio de varios pasajeros que viajaron en ese vuelo, Giorgi fue increpada y cuestionada por los turistas que se vieron complicados para subir al avión por la decisión de la Casa Rosada que luego fue revertida por la Justicia. Como para que no quedaran dudas de la decisión oficial en ese vuelo estaban, incluso, los diarios del día con la noticia de la restricción impuesta por el Gobierno a la compañía aérea competencia de Aerolíneas.
Un puntano rebelde: Poggi, más lejos de los Rodríguez Saá
La distancia que separa al gobernador de San Luis, Claudio Poggi, de sus antecesores, los hermanos Alberto y Adolfo Rodríguez Saá, es cada vez más amplia y genera mucha molestia entre los peronistas que rodean a las antiguas autoridades provinciales. Una prueba de ello se dio en la apertura de sesiones ordinarias de la Legislatura puntana del lunes último, cuando el mandatario provincial lució un atuendo inusual: el bastón de mando y la banda de gobernador, hecho inédito en los últimos años y una muestra de poder incontrastable.
A tono con la actual relación de cordialidad que hoy sostiene con la Casa Rosada, Poggi apenas mencionó tres o cuatro veces en su discurso a los hermanos que estuvieron en el poder en San Luis, que entre los dos gobernaron más de 25 años ininterrumpidos. No se vieron las reacciones de los hermanos puntanos: Alberto y Adolfo Rodríguez Saá no estuvieron en el acto. Ya no soportan tanta rebeldía de quien fuera un discípulo disciplinado.
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