Claves de la decisión y cómo sigue la disputa

El Gobierno siempre había contado con el voto seguro de Eugenio Zaffaroni, el juez más oficialista. Le era fácil sumar el de Elena Highton, que por ideología no simpatiza con la prensa tradicional. El apoyo de Ricardo Lorenzetti era fundamental. Pero el voto decisivo fue el de Enrique Petracchi, que se sumó hace casi dos meses.

Petracchi siempre fue un juez de tradición liberal y, durante el menemismo, fue uno de los magistrados que más se preocuparon por controlar al Gobierno. Ahora, adoptó una postura diametralmente opuesta: suscribió una sentencia que, en realidad, viene a convalidar una de las leyes más controvertidas de los últimos diez años.

Esos cuatro votos son el eje de la sentencia que, desde ayer, le permite al Gobierno revivir el sueño de desmembrar al Grupo Clarín. La pregunta es cómo sigue esta película.

Ahí surgen varias dudas, pero todo indica que habrá una larga judicialización, en un contexto en el cual el Gobierno no aparece tan fuerte como hace un año.

Veamos: ayer la Corte dijo que el plazo de desinversión del artículo 161 está vencido, pero ¿tendrá Clarín un plazo para presentar su plan de adecuación? La sentencia quedará firme en diez días. Ayer, en declaraciones públicas difundidas por Télam, Zaffaroni reconoció que podía tener un nuevo plazo.

Pero ¿cuál será la reacción de Martín Sabbatella, titular de Afsca, que quiere comenzar ya la desinversión de oficio? Por otra parte, la Cámara Civil y Comercial declaró nula la desinversión que de oficio que había iniciado el funcionario.

Hay otra punta para explorar: la Corte dijo que Afsca debe ser independiente, para aplicar la ley. ¿Es Sabbatella realmente independiente, cuando participa en todos los actos y es un militante K? La Corte no hizo más que expresar una expresión de deseos, por no dijo cómo Clarín podrá lograr que Afsca actúe en forma imparcial.

Finalmente, ¿quién elegirá las licencias de TV y radio o las de cable que deba vender Clarín? Las dudas sobran. Y también los litigios por venir.

El fallo completo