El Gobierno pide celeridad en la causa de los cuadernos de las coimas
Luego del fuerte impacto de la resolución del juez federal Claudio Bonadio , el gobierno de Mauricio Macri reclamó celeridad en el proceso judicial en el que se investiga a la expresidenta Cristina Kirchner como jefa de una asociación ilícita para que la causa llegue cuanto antes a la "instancia del juicio oral para que haya sentencia", algo que estimó debería ocurrir en el "primer semestre de 2019".
La decisión del juez Bonadio de procesar y pedir prisión preventiva para la expresidenta en la causa de los cuadernos de las coimas , y acusarla de dirigir una asociación ilícita conformada por varios exfuncionarios y empresarios de la construcción, fue el asunto principal de la reunión de gabinete que encabezó Macri.
Sobre ese punto, el ministro de Justicia, Germán Garavano, señaló que analizaron la resolución del juez y que "lo importante sería que estos casos lleguen a juicio oral, que es la instancia en donde el fiscal debe mostrar que una persona es culpable y esto será resuelto por le tribunal".
Sobre este punto, Garavano informó al Presidente que "probablemente muchas de las partes recurran la resolución ante la Cámara Federal y luego la Cámara de Casación Penal". De allí que estimó que la demora podría determinar que el juicio oral sea sólo el año próximo.
"Va a depender mucho de cuánto se demoren las apelaciones, las resoluciones de los órganos superiores, pero uno podría estimar que en el primer semestre del año que viene sería un tiempo razonable para que estos casos estén en juicio oral", dijo el ministro de Justicia.
Garavano sostuvo que "esto es muy importante porque hay personas privadas de libertad, con prisiones preventivas, y la Argentina tiene compromisos nacionales e internacionales respecto de la duración de estas prisiones preventivas, con lo cual cuanto más rápido pueda ser el proceso nos parece importante".
Y puso como ejemplo el juicio oral en el que fue condenado el exvicepresidente Amado Boudou por la causa Ciccone, aunque señaló que "esa sentencia sentencia que aún no está firme".
Además, Garavano reclamó la búsqueda del dinero producto de la corrupción y pareció pedir mayor celeridad también en este punto cuando subrayó "la preocupación de la búsqueda del dinero de estos delitos para que pueda volver al Estado para aquellos que más lo necesitan para los proyectos que se llevan adelante".
El ministro marcó la postura oficial de no opinar sobre el desafuero de la ex presidenta Cristina Kirchner y dejar esa decisión en manos del Senado, que es un poder independiente. "Es una decisión del Senado sobre la cual el Poder Ejecutivo no va a avanzar", dijo.
Señaló que "es importante marcar el clima de libertad y fortalecimiento institucional que se vive" y dijo que "la Justicia puede hablar con independencia y sin presiones lo mismo que el Congreso y la prensa".
Por su parte, el ministro de Transportes, Guillermo Dietrich, señaló que la causa de los cuadernos de las coimas del kirchnerismo generaron inquietud por la continuidad de las obras públicas pero dijo que se dieron "continuidad a los avances en las obras de infraestructura y los programas de participación publico privada (PPP), algo que el Presidente está muy cerca para mejorar el empleo".
Por eso, Dietrich comentó en la reunión de ministros que están comenzando las primeras obras de los PPP con la repavimentación de la Atopista Ezeiza Cañuelas y se están "creando las herramientas financieras para minimizar el impacto del proceso judicial". Sin embargo, admitió que "esto impacta en la economía" aunque subrayó la intención de "continuar con las obras en ejecución".