El Gobierno prevé designar a 300 funcionarios por concurso de antecedentes

El llamado sorprendió a más de un ministro, y provocó escozor en decenas de despachos. “El ministro Ibarra necesita veinte cargos de su ministerio para concursar”, escucharon representantes de cada uno de los miembros del gabinete, sorprendidos por la iniciativa, que también llegó por escrito a las casillas de mail de cada dependencia.

Es que por orden directa del presidente Mauricio Macri , el ministro de Modernización, Andrés Ibarra , pondrá en marcha el mes próximo el proceso para elegir, por concurso de antecedentes, a 300 directores y coordinadores nacionales en cargos actualmente vigentes. La idea es cubrir las vacantes antes de fin de año. En resumen: quienes hoy ocupan esos cargos deberán presentar, al igual que cualquier otro interesado, su currículum, y competir de ese modo para cubrir determinados puestos en el Estado.

Desde el Ministerio de Modernización aclararon como será el proceso. “Cada ministerio debe enviar una lista con quince cargos a cubrir, de subsecretarios para abajo. En septiembre se concursarán unos cien”, precisaron cerca del ministro, a quien Macri le pide en cada reunión de seguimiento avances en este tema.

Luego de publicado el concurso en medios nacionales, los interesados enviarán sus antecedentes a la secretaría de Empleo, a cargo de Pablo Legorburu, un técnico que depende de Modernización.

“La idea es generar un Estado que tenga una conducción profesional, con mayor estabilidad, y que su continuidad dependa de la evaluación de desempeño y el cumplimiento de objetivos más que de la autoridad política de turno”, dijo Ibarra a LA NACION.

¿Resistencias? En el ministerio reconocen que “algunos ministros son más cumplidores que otros, y no quieren que les toquen a sus coordinadores o directores”, reconocieron.

Por el lado de los gremios, desde el Gobierno confirman que están “enterados” de la iniciativa, y en proceso de negociación con los funcionarios para precisar sus términos. “Deberían estar de acuerdo con la medida, porque a ellos les interesa la estabilidad laboral, y no que un empleado se tenga que ir porque cambia un gobierno”, afirmaron en el oficialismo. De todos modos, el concurso exitoso no garantizaría empleo en el Estado “para siempre”, al menos esa sería la propuesta que lleva la Casa Rosada en sus conversaciones con UPCN y ATE, los gremios que nuclean a los empleados del Estado.

No se trata, por cierto, de una idea sin antecedentes. Durante el gobierno de Néstor Kirchner, más precisamente en septiembre de 2007, el abogado Guillermo Alonso fue elegido por concurso como director general del Museo Nacional de Bellas Artes. Fue el primero de los nombramientos por concurso de once directores de museos nacionales.

Se trató, con todo, de un llamado acotado a dependencias del Ministerio de Cultura, que se mantiene hasta hoy. En este caso, son todos los ministerios los que deberán adaptarse al pedido presidencial: cien concursos iniciados en septiembre, trescientos para fin de año, la mitad de los coordinadores y directores hacia el final de su mandato, a fines de 2019.