El recuerdo de la caricatura de Sábat y el "mensaje cuasi mafioso"

La guerra contra los medios, y en particular contra el Grupo Clarín, ya estaba declarada. Cristina Kirchner daba un discurso en la Plaza de Mayo, en la que pretendía ser su primera "Plaza del Sí".

Era 1º de abril de 2008. En un mensaje de 27 minutos, la Presidenta aseguró no haber visto "nunca en tan corto tiempo tantos ataques, ofensas e insultos a un gobierno surgido del voto popular". Incluso atribuyó esa circunstancia a su condición de mujer.

Pero definitivamente sorprendió a todos cuando aludió a "generales multimediáticos" y los acusó de "cambiar y tergiversar la información". A eso sumó una alusión directa a una caricatura del prestigioso dibujante Hermenegildo Sábat que el diario Clarín había publicado el día anterior.

"Son los mismos que hoy pude ver en un diario donde colocan mi caricatura, que no me molesta -a mí me divierten mucho las caricaturas y las propias son las que más me divierten-, pero era una caricatura donde tenía una venda cruzada en la boca, en un mensaje cuasi mafioso. ¿Qué me quieren decir? ¿Qué es lo que no puedo hablar? ¿Qué es lo que no puedo contarle al pueblo argentino?", se quejó entonces.

La dura embestida presidencial provocó la inmediata reacción de distintas entidades periodísticas y de la oposición.

En aquel momento, consultado por LA NACION, el editor general de Clarín, Ricardo Kirschbaum, aseguró: "El Gobierno no entiende lo que es el papel de la prensa en una sociedad democrática. No desde ahora, sino desde la anterior gestión tiene una apreciación equivocada de lo que debe ser la labor del periodismo. Me parece una exageración lo que dijo sobre el papel de la prensa cuando el periodismo dice algo que no se ajusta al deseo oficial".

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