Kirchner: "No he llegado para pactar"
El presidente electo aseguró que no acordará con el pasado ni será presa de las corporaciones; críticas a la actitud menemista
En su último discurso como candidato, Néstor Kirchner abandonó el tono medido de los últimos días y eligió palabras duras para calificar la actitud de Carlos Menem. "Vivimos un escenario de ridículo sin retorno ante el mundo", aseguró.
A media tarde, en el hotel Panamericano, cuando el ex presidente y su compañero de fórmula, Juan Carlos Romero, aún no habían confirmado que desistían de participar en la segunda vuelta, Kirchner leyó un texto en el que se mostró enérgico y, por momentos, habló como lo hace un presidente.
"Ante las circunstancias que son de público y notorio para los argentinos y de lamentable conocimiento para el resto del mundo, creo necesario dirigirme a mis conciudadanos", arrancó el todavía candidato presidencial.
"En el día de ayer hemos vivido una de las jornadas más oprobiosas y bochornosas de las que se tenga memoria. Un país en vilo y sus instituciones democráticas jaqueadas. No es la primera vez que esto ocurre en nuestro país", se lamentó después.
En su primera aparición pública luego de que trascendió la renuncia de su rival, Kirchner no sólo habló del futuro, sino que también aludió al pasado: "Mi generación y la historia recuerdan otros golpes a la democracia. Pero lo inédito e insólito -por su gravedad y profundidad- es que en esta oportunidad el intento proviene de un ex presidente constitucional que al no poder lograr ser reelegido por tercera vez tira del mantel sin importarle los daños. Dispara sobre las instituciones de la República con la misma violencia de su discurso y con la misma impunidad de su gestión".
El candidato del Frente para la Victoria dijo que no deberíamos sorprendernos ante la actitud de Menem porque "primero les robo a los argentinos el derecho a trabajar, el derecho a comer, el derecho a estudiar, el derecho a la esperanza". Y "ahora vino por el último de los derechos ciudadanos que quedaba en pie: votar".
Final de un ciclo
Para el presidente electo, con la dimisión del ex mandatario "culmina en la Argentina un ciclo histórico signado por los liderazgos mesiánicos, fundamentalistas y excluyentes donde hubo dirigentes que se creyeron con el derecho divino de no tener que dar explicaciones a la sociedad de lo que han hecho".
Kirchner consideró que el retiro de la fórmula del ex presidente del proceso del ballottage "es absolutamente funcional a los intereses de grupos y sectores del poder económico que se beneficiaron con privilegios inadmisibles durante la década pasada, al amparo de un modelo de especulación financiera y subordinación política".
Según él, "a esos mismos intereses que cooptaron el Estado y compraron la política, a esos mismos intereses que corrompieron a los dirigentes y arruinaron la vida de los ciudadanos, tributa esta huida".
Las elecciones del 27 de abril mostraron para Kirchner una intención de cambio de los ciudadanos. Y la decisión de Menem y su compañero es un "intento de deslegitimar la voluntad de la sociedad" y "apunta a mostrar débil y frágil al gobierno que se inicia para tratar de imponerle la continuidad de las políticas llevadas adelante durante la década de los noventa".
Además de criticar a Menem, Kirchner dedicó algunos párrafos a hablar de su gobierno. "Voy a asumir todas las responsabilidades que la Constitución y el pueblo me imponen", afirmó.
El mandatario electo dijo que asumirá con "coraje y decisión la responsabilidad de gobernar la República, lo que significa refirmar el sistema democrático, que en esta etapa implica además mejorar la calidad de sus instituciones".
Señaló que "el marco institucional y político exige una profundización del sistema democrático, ya que es la voluntad popular la gran legitimadora de políticas que tornarán viable una gestión, en una Argentina devastada, presionada y extorsionada por la voracidad especulativa, las practicas corporativas y los egoísmos personales de sus dirigentes políticos".
Kirchner negó haber realizado pactos para llegar a la presidencia. "No he llegado hasta aquí para pactar con el pasado. Ni para que todo termine en un mero acuerdo de cúpulas dirigenciales. No voy a ser presa de las corporaciones", prometió.
Por la noche, cuando estuvo en el programa "A dos voces", que emite TN, reiteró que "algunos trasnochados generan situaciones límite para tratar de negociar pactos de impunidad", pero afirmó que los presuntos ofrecimientos fueron rechazados.
El presidente electo dijo estar dispuesto a "dar vuelta la página de la historia" y convocó a la tarea de "construir un país diferente" sin distinción de partidos ni sectores.
Febril final
Durante las horas previas a que Carlos Menem anunciara públicamente su renuncia al ballottage, las calles de Buenos Aires se convirtieron en el escenario de una batalla de pegatinas: mientras militantes kirchneristas colocaban una banda roja con la leyenda "Fuiste" encima de los carteles de Menem, los menemistas, como un rayo, ensalzaban la figura de su líder con la consigna: "Con Menem ganamos todos".