La Iglesia agradeció a los senadores que rechazaron la legalización

La Iglesia celebró hoy que el Senado haya rechazado la ley de interrupción voluntaria del embarazo, agradeció a los senadores que votaron en contra del proyecto que tenía media sanción de la Cámara de Diputados y llamó a "asumir y trabajar las divisiones" que, asegura, surgieron del debate.

A través de un documento difundido poco antes del mediodía, la Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Argentina que preside monseñor Oscar Ojea, destacó la participación de la Iglesia en la discusión que en los últimos meses se dio en el Congreso "procurando un diálogo iluminador sin considerar enemigos a quienes pensaran distinto".

Bajo el título "Vale toda Vida", agradeció a "tantos hombres y mujeres, a los senadores y a las instituciones" que se pronunciaron "en defensa de la vida". Ese párrafo incluye una referencia a "los pobres". "Agradecemos especialmente el testimonio de los pobres que siempre nos enseñan a recibir la vida como viene y a saber cuidarla porque es un don de Dios", dice el texto.

El rol activo que asumió la Iglesia desde que la interrupción voluntaria del embarazo obtuvo media sanción en Diputados, y su fuerte influencia en el norte del país, fueron dos factores determinantes para que en el Senado fracasara la sanción de la ley.

No obstante, en su pronunciamiento de hoy, el Episcopado llama a "prolongar los meses de debate y propuestas en la concreción del compromiso social necesario para estar cercanos a toda vida vulnerable".

En ese contexto, los obispos mencionan los "desafíos pastorales" de "anunciar con más claridad el valor de la vida", "la educación sexual responsable" , el acompañamiento "a mujeres embarazadas en situación de vulnerabilidad" y la "atención a personas que han pasado por el drama del aborto".

El comunicado está firmado por Ojea, por el arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli , por el arzobispo electo de Mendoza, Marcelo Colombo, y por el obispo de Chascomús, Carlos Malfa.

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