La Presidenta viaja hoy a Brasil con Insaurralde para ver al Papa

En un empeño por trasladar la campaña electoral a Brasil, la presidenta Cristina Kirchnerviajará hoy a Río de Janeiro y llevará al candidato a diputado nacional por el Frente para la Victoria, Martín Insaurralde, para participar de la misa de cierre de la XXVIII Jornada Mundial de la Juventud, que presidirá el papa Francisco. Buscará, así, la foto del candidato bonaerense con el Santo Padre, a 16 días de las elecciones primarias del 11 de agosto.

El desafío de la mandataria es transferirle a Insaurralde, que tiene aún altos índices de desconocimiento, parte de su popularidad para apuntalarlo frente a su rival del Frente Renovador,Sergio Massa, favorito en las encuestas.

Hasta ayer la intención de la Casa Rosada era exhibir al intendente de Lomas de Zamora junto al pontífice y a la Presidenta en tierras cariocas, confiaron fuentes gubernamentales. Eso podría cambiar si existiera una decisión presidencial de último momento. El equipo de Insaurralde no confirmó ni desmintió la información, en medio de un clima de llamativo hermetismo. "Hasta ahora va. Habrá que ver , porque en las últimas horas estaba con fiebre", deslizó una fuente presidencial.

"Esa foto es complicada, hay que ver si la logra", comentó ayer una fuente allegada a la Presidenta. Se descuenta, eso sí, que la mandataria tendrá la oportunidad de saludar protocolarmente a Francisco.

En plena campaña electoral, Cristina buscó ayer asociar su figura a la del Santo Padre y se las rebuscó para encontrar similitudes entre Francisco y el ex presidente Néstor Kirchner (ver aparte).

Antes de llevar a Insaurralde a buscar la bendición papal, la Presidenta encabezará hoy un acto en San Fernando, distrito aliado al massismo, junto con el intendente de Lomas de Zamora. Inaugurarán una planta de líquidos cloacales en AySA, pero sin el intendente de San Fernando, Luis Andreotti, alineado con Massa.

La comitiva oficial que partirá a Brasil será muy reducida: el canciller, Héctor Timerman, y el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini. En Río de Janeiro la esperan desde ayer el secretario de Culto, Guillermo Oliveri, y el embajador argentino en Brasil, Luis María Kreckler.

Según confiaron ayer a LA NACION fuentes de la Casa Rosada, la partida no tenía hasta ayer horario fijo. Se espera a partir de las 18. La primera y única actividad oficial de la Presidenta será la misa de cierre, mañana, a las 10, sobre la playa de Copacabana. Luego de ello, Cristina Kirchner tiene previsto su regreso.

Estarán la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, y el boliviano Evo Morales. Se prevé que Francisco saludará a los mandatarios de manera protocolar, pero sin agenda acordada. Tanto Oliveri como Kreckler tuvieron anteayer un breve contacto con Francisco, en el encuentro papal con los jóvenes argentinos. "¡Bienvenidos!", los recibió el Papa y les extendió la mano, según comentó una fuente oficial. "Se lo notaba de muy buen humor", agregó.

El Gobierno continuó ayer con el reparto de fondos públicos para apuntalar la campaña. Zannini criticó a los dirigentes de la oposición y los descalificó "como los mediáticos de la farándula, pero de la política", al distribuir obras públicas para 77 intendentes y siete intendentes de Córdoba.

Comparación con Kirchner

"Me gustó escuchar al Papa en Río decir que la Iglesia no era una ONG", dijo ayer Cristina Kirchner, al comparar a Francisco con su esposo Néstor Kirchner. "La política no es una ONG: es ideas, convicciones, necesita de predicadores que lleven la palabra y militen, trabajen. Bienvenida esta nueva idea", afirmó la Presidenta, al inaugurar el estadio de Deportivo Morón.

"Néstor también les dijo que transgredan, que salgan a la calle", exclamó, en referencia al llamado del papa Francisco a los jóvenes a "hacer lío".

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