Cómo es el plan "antigrieta" al que se aferra Lavagna
Luego del accidentado cierre de listas de candidatos, el precandidato presidencial de Consenso Federal, Roberto Lavagna se puso a trabajar en el plan de campaña para derrotar a la polarización entre el gobierno de Mauricio Macri y el kirchernismo. El primer paso será intentar instalar la idea de que las PASO del 11 de agosto próximo servirán para que los ciudadanos que no comulgan con Macri o Cristina Kirchner puedan"elegir" y no "optar": votar "sin culpa" y por el candidato "deseado" y no por el "voto útil".
El segundo paso consistirá en convencer al electorado de que la fórmula Lavagna- Juan Manuel Urtubey es la más idónea para ganarle un ballottage tanto a Macri como al binomio kirchnerista Alberto Fernández -Cristina Kirchner. Ni Macri puede garantizar el triunfo sobre la dupla del Frente de Todos, ni esta puede asegurar que le ganará a la fórmula Macri- Miguel Pichetto .
Pero la mayoría de las encuestas indican que el tándem Lavagna-Urtubey le ganaría a cualquiera de los dos, indistintamente, porque obtendría el apoyo del votante de cualquiera de los dos candidatos que quede fuera de la segunda vuelta. La mayor dificultad que enfrenta Consenso Federal es poder ingresar en el ballottage tras las elecciones generales del 27 de octubre. Y no es un detalle menor: las encuestas, por ahora, mantienen a Lavagna lejos de los dos candidatos de los "polos de la grieta".
No obstante, en el equipo de Lavagna sostienen que en las primarias de agosto su fórmula podría aspirar a sacar entre 18 y 22 por ciento de los votos "del medio", de los ciudadanos que no quieren votar ni a Macri ni a Cristina.
El sábado último, el propio exministro de Economía expuso esta estrategia en su cuenta de Twitter. "Si estás en el 50% que no quiere ni a Macri ni a Cristina, la PASO es el momento. Es la encuesta para decir qué fórmula es lo mejor para Argentina. No votes por bronca ni por miedo. Fortalecé en la PASO tu opción para la verdadera elección, la de octubre", escribió.
Si estás en el 50% que no quiere ni a Macri ni a Cristina, la PASO es el momento. Es la encuesta para decir qué fórmula es lo mejor para Argentina. No votes por bronca ni por miedo. Fortalecé en la PASO tu opción para la verdadera elección, la de octubre. #ConsensoFederal&— Roberto Lavagna (@RLavagna) 23 de junio de 2019
El papel de Lavagna será hablar mucho de la economía, del "bolsillo de la gente", que es la preocupación más urgente que registran las encuestas. "Cuando hablamos de política y candidaturas, el rating baja. Cuando hablamos de cómo resolver los problemas económicos, la aguja sube", dijo a LA NACION.
"El Durán Barba español"
La primera decisión del equipo del precandidato presidencial, luego del conflicto del cierre de listas, será integrar al consultor en campañas Antonio Sola, conocido como el " Durán Barba español". Fue acercado por Urtubey, de quien es amigo y cliente hace años. Lavagna y su entorno conocen a Sola desde que asesoraba a Sergio Massa en la campaña presidencial de 2015 y cuando fue candidato a senador en 2017. Eran tiempos en que Lavagna y su hijo Marco militaban junto al hoy traspasado precandidato a diputado del kirchnerista Frente de Todos.
Bajo la dirección del jefe de campaña, Alejandro "Topo" Rodríguez, el equipo de Sola coordinará las tareas con el de los creativos publicitarios son Raúl Timerman y Juan Carlos Malagoli, de la agencia Comunicaciones Sudamericanas. Los publicistas ya mantienen reuniones periódicas con los diputados Graciela Camaño , Marco Lavagna, Urtubey y con el asesor en medios, Armando Torres.
El papel de Urtubey será aportar discurso político como dirigente de la nueva generación del peronismo no kirchnerista. "Lavagna aporta el ‘seniority’ de la economía, Urtubey la juventud", dijo un hombre de la comunicación lavagnista.
El gobernador de Salta comenzará a conversar con sus pares peronistas para buscar entre ellos espacios de apoyo en las provincias a la fórmula de Lavagna. No todos los mandatarios provinciales apoyarán a ciegas a la fórmula kirchnerista, según fuentes del lavagnismo, y muchos quedaron heridos y presentaron candidatos a diputados nacionales con "lista corta", sin boleta presidencial.
Lo mismo ocurre con los intendentes del conurbano bonaerense, enojados por la conformación ultrakirchnersita de las listas de diputados. En este caso, la interlocutora será Camaño, que encabezará la lista de diputados de la provincia, que habla el mismo lenguaje de los barones del conurbano y que tiene suficientes pergaminos peronistas como su marido, el jefe gastronómico Luis Barrionuevo .
"La gran idea fuerza de tratar de buscar que la gente vote en las PASO sin pensar en el voto útil, en votar al menos malo, que pierda el miedo a que gane el peor, que vote por el candidato que realmente quiere porque las PASO no definen la contienda entre Macri o Cristina", dijo un dirigente cercano a Lavagna. El objetivo es lograr una cantidad de votos en las PASO que pueda sorprender positivamente, para que ello le de impulso a la fórmula con miras a las elecciones generales del 27 de octubre.
"Si nosotros logramos quedar 7 puntos abajo del candidato que salga segundo en las PASO, podemos convencer al electorado de que en la segunda vuelta nosotros garantizamos ganarle a Cristina o a Macri, según quien quede primero en las primarias", dijo a LA NACION un alto dirigente de Consenso Federal.
En este sentido, apuestan al efecto psicológico de las primarias, en el cual un "tercero en ascenso" puede sobrepasar a un "segundo estancado" con miras a las elecciones de primera vuelta, para luego ganar el ballottage. Es una apuesta fuerte, pero es la única que tiene hoy por hoy Lavagna para vender esperanza.
"La estrategia es hablarle a la gente de que tenemos la fuerza política y el candidato para sacar a la Argentina de este lugar. Hay que escuchar a la gente más que a la política", dijo Urtubey a LA NACION. "El desafío es explicarle a los electores lo que nosotros podemos hacer por el país", agregó el gobernador salteño.
En el equipo de Lavagna presumen que el electorado politizado ya sabe a quién votar, porque mira las encuestas. Pero la estrategia buscará seducir al ciudadano común al que le son ajenas las mediciones de intención de voto. Para ello, Lavagna saldrá a explicar en detalle el diagnóstico de la situación micro y macroeconómica y las propuestas para salir de la crisis de recesión. En esa línea, hablará de bajar la inflación, incentivar el consumo, bajar los impuestos, generar mayor poder adquisitivo, reactivar la producción, crear trabajo, mejorar la educación inicial, primaria, secundaria, la nutrición infantil, la capacitación en oficios para titulares de planes sociales, el medio ambiente, y todo bajo una perspectiva económica para aprovechar el perfil de exministro de Economía del candidato.
Más leídas de Política
Por la compra de los F-16. Duras críticas de Grabois a Milei, Petri y Bullrich: "falso profeta", "salame" y "Pepita la Pistolera"
"La oferta de China era mejor". Fuertes críticas del kirchnerismo a la política militar y a la compra de los F-16
Esquivó su juicio político. Acusado de “posibilitar el robo” del kirchnerismo, renunció el jefe del máximo órgano de control de Santa Cruz