Legalización del aborto: "Nadie se puede sorprender", el mensaje del Gobierno a la Iglesia

El secretario de Culto, Guillermo Oliveri, dijo hoy que "nadie se puede sorprender" con el proyecto de legalización del aborto que el gobierno nacional dijo que enviaría al Congreso. En respuesta a las autoridades del Episcopado, quienes calificaron el anuncio como "inoportuno" y expresaron que los "sorprende tristemente", Oliveri declaró: "No estamos escondiendo nada debajo del poncho y eso facilita el diálogo. La idea no es romper ni cortar los puentes".

En diálogo con Radio Provincia, el secretario de Culto defendió al presidente Alberto Fernández, tras considerar que el mandatario "nunca ocultó su posición". Y destacó: "En todas las reuniones [con la Iglesia], el tema lo sacó siempre él, dijo que tenía un compromiso y una posición respecto del tema del aborto. Así que nadie se puede sorprender".

"Evidentemente el Presidente va a cumplir con lo que prometió y con lo que cree", completó, para señalar que esa falta de ambigüedades de ambas partes debería facilitar el diálogo.

La Iglesia transmitió esta mañana su malestar por la decisión oficial de enviar el proyecto al Congreso en tiempos en el que el país enfrenta "un humillante aumento de la pobreza".

En el contexto de la emergencia por la pandemia, los obispos alegaron que "no hay lugar para pensar en proyectos legislativos que contradicen el discurso que dice cuidar a todos los argentinos como prioridad".

Aumento de la "brecha"

"Nos preocupa todo cuanto pueda alejarnos de este compromiso por la unidad a favor del bien común o que pueda acrecentar la brecha que nos divide", advirtió la comisión ejecutiva del Episcopado, en una declaración oficial. Según el escrito, la iniciativa de Fernández "desalienta la búsqueda del encuentro fraterno e imprescindible entre los argentinos".

En este marco, los obispos cuestionaron que el proyecto para consagrar el aborto se retomara "cuando el ánimo de los argentinos se sobrepone a con paciencia, ingenio y esperanza –aún ante la pérdida de seres queridos en las familias–; cuando padecemos el humillante aumento en la cantidad de hogares cada vez más pobres; en un año escolar que dejó al margen a una gran cantidad de alumnos y puso en evidencia la desigualdad de recursos y medios".