Los cuadernos de las coimas: detuvieron a dos exsecretarios de Cristina Kirchner
Daniel Muñoz, el exsecretario de Néstor Kirchner, está muerto y no puede responder ante la Justicia por su rol de receptor del dinero de la corrupción en nombre del expresidente. En cambio, Fabián Gutiérrez, exsecretario de Cristina Kirchner, quedó detenido en Río Gallegos acusado de recibir el dinero de la recaudación ilegal cuando bajaba los bolsos del avión presidencial en Santa Cruz. Cayó preso en su hotel de la avenida Néstor Kirchner.
También fue detenido Julio Daniel Álvarez, conocido como Danielito por Kirchner. Acompañó como secretario al matrimonio entre 2003 y 2010, y está acusado de participar en la maniobra.
Álvarez fue apresado a la 1.10 en Barrio 366, casa 346, domicilio de sus padres, y Gutiérrez fue detenido a la 1.33 en su hotel Comercio, de la avenida Néstor Kirchner 1302.
Además, Bonadio pidió la captura de otros colaboradores del matrimonio en la Patagonia: Norberto Sosa; Raúl Copetti, recaudador de la campaña kirchnerista, y Ricardo Barreiro, jardinero de la familia, empresario y de buen pasar económico.
Gutiérrez se había puesto a disposición de la Justicia la semana pasada, mediante un escrito que presentó su abogado Martín Magram y pidió su excarcelación.
El exfuncionario apareció comprometido con la causa cuando el exsecretario de Obras Públicas José López lo mencionó como la persona que le entregó los US$9 millones que había en los bolsos que intentó ocultar en un monasterio de General Rodríguez. Ese dinero, dijo, pertenecía a Cristina Kirchner .
Recordó que ya fallecido Néstor Kirchner en 2010, pero antes de la muerte de Daniel Muñoz, Gutiérrez lo llamó en 2016 para reunirse con él. Se encontraron en el Hotel NH Buenos Aires City, dijo López. Mencionó que antes de junio de ese año, Gutiérrez le dijo que debía cambiar de lugar un dinero, cuyo monto no le indicó. López dijo que pensó en llevar esa plata al convento de monjas de General Rodríguez, donde solía concurrir con su mujer y adonde iban Julio De Vido y Alicia Kirchner, entre otros. Y reveló que le dejaron los bolsos que llevó al convento, mientras era vigilado por tres personas, hasta que quedó preso.
"Gutiérrez era funcional a los dos, a Néstor y a Cristina, pero en ese momento la única que vivía era Cristina, la plata era de la recaudación, no sé dónde estaba antes. Si me llamaba Fabián era porque Cristina se lo había indicado. Fabián era Cristina. Yo me preguntaba en ese momento por qué me había elegido a mí. Es obvio que creía que el dinero era de Cristina y que quien estaba enviando a Fabián era ella y por eso le hice caso", declaró López ante el juez Bonadio y el fiscal Carlos Stornelli.
Con esta declaración selló la suerte de Gutiérrez y de la propia Cristina Kirchner como dueña del dinero, según su relato. López declarará el próximo jueves en el juicio oral y público que se le sigue por enriquecimiento ilícito, a raíz del hallazgo de los US$9 millones en su poder. Se espera que repita la misma declaración que hizo como arrepentido y que los jueces del tribunal oral le crean para evitar una condena. Aunque aún debe explicar cómo adquirió su casa de Dique Luján y un departamento en Recoleta, en el que vivía su hija.
Álvarez, en tanto, y el resto de los acusados quedaron complicados en la causa por la declaración que realizó Sergio Velázquez, expiloto de confianza de los Kirchner que manejaba el avión presidencial. Conocido como el Potro, declaró como testigo que en los aviones iban valijas cerradas con candado en la cabina y no en la bodega, y que Muñoz no permitía que las valijas fuera escaneadas en el Aeroparque cuando iban a Río Gallegos o El Calafate. Velázquez dijo que quienes esperaban el avión en el sur, cuando llegaba Muñoz, eran Roberto Sosa, Daniel Álvarez y Copeti. En El Calafate, en tanto, los esperaba Ricardo Barreiro, el jardinero. Velázquez no mencionó dinero, pero señaló que las valijas llegaban llenas y se iban vacías.
Gutiérrez es conocido por convertirse súbitamente en millonario, El juez Marcelo Martínez de Giorgi lo investiga por lavado de dinero, luego de que años atrás Bonadio lo sobreseyera en una causa por enriquecimiento ilícito.
Álvarez también tuvo una fortuna similar. Multiplicó su patrimonio mientras fue secretario de los Kirchner. Se fue con $300.000 de patrimonio, según declaró, además de una casa en Río Gallegos y dos terrenos en El Calafate. Fue candidato a intendente financiado por Lázaro Báez. Siempre estuvo cerca de Cristina Kirchner y aun ahora que la visita cuando va a El Calafate.
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