Más de 1000 piquetes: por qué enero es un problema para Mauricio Macri desde que asumió
En los tres eneros de gestión como presidente, Mauricio Macri sufrió 1001 piquetes y en tan solo el primer mes de 2018 aumentaron un 75% respecto al mismo período del año anterior. Esta cifra no es coincidencia, ya que el mandatario incluso obtuvo el récord en número de piquetes de enero en 2016, con 456 bloqueos en todo el país.
Las cifras representan altos niveles de conflictividad, más si se comparan con el 15% menos de piquetes que soportó Cristina Kirchner durante los primeros tres eneros de su segundo mandato. Así surge de un relevamiento diario sobre una base de más de 200 medios de comunicación nacionales, provinciales y locales que realiza la consultora Diagnóstico Político desde el 2009, y que LA NACION Data analizó y clasificó.
El primer enero en el poder de Mauricio Macri -2016- fue mes con mayor número de piquetes desde 2009. Los trabajadores estatales realizaron el 26% de los bloqueos a raíz de los numerosos despedidos del Estado Nacional que llevó adelante la nueva administración.
Además, Tupac Amaru y otras organizaciones sociales bloquearon el acceso a Capital Federal y a otras localidades del país en pedido de la liberación de Milagro Sala, detenida el 16 de aquel conflictivo enero. Ellos realizaron el 14% del total de piquetes en ese mes. Se sumaron también las protestas vecinales por inseguridad y apagones y los reclamos por las demoras y cancelaciones en Ezeiza.
En contraste, el segundo enero de Macri representó una abrupta caída del 56% respecto al mismo mes del año anterior. Se trató de unos primeros 30 días calmos con tan sólo 198 manifestaciones que se caracterizaron por la participación de los vecinos autoconvocados, que realizaron el 41% (81) del total de bloqueos en el país. La razón principal de conflicto fueron los cortes de luz con altas temperaturas y la inseguridad. Además, se sumaron los reclamos de los trabajadores estatales, que ante nuevos recortes encabezaron el 18% de los bloqueos. El conflicto en el Conicet fue por entonces otro foco de conflicto.
Con respecto a 2018, el año continuó con el ritmo de diciembre, uno de los meses más problemáticos. Se registraron allí 149 piquetes más que en el mismo período del año anterior. Las manifestaciones aumentaron en 21 jurisdicciones y en términos absolutos, Buenos Aires y Capital Federa lideraron el ránking, con 71 y 64 bloqueos respectivamente. Ambos distritos concentraron el 39% de todos los piquetes. Bastante más atrás se ubicaron: Santa Cruz (20), Neuquén (18), Santa Fe (15), Entre Ríos (15), Salta (14) y Catamarca (14). En contraste, las provincias menos conflictivas fueron San Luis, sin bloqueos, y Santiago del Estero y La Rioja, con dos cada una.
"Respecto al aumento numérico, 2018 contra 2017, en el caso de la CABA, 2017 tuvo un verano relativamente tranquilo, sin fuertes ajustes ni despidos, seguramente por ser año electoral. Este enero, en cambio, hubo mucha más presencia de sindicatos estatales por despidos y de organizaciones sociales y partidos políticos, en protestas fuertemente politizadas", explicó Patricio Giusto, director de la consultora.
"Hay que decir que el contexto económico tampoco ayuda, con perspectivas mucho más pesimistas tras el reajuste de metas de inflación, la presión del Gobierno sobre el moyanismo y medidas polémicas, como la reforma previsional", agregó Giusto.
Durante la gestión de Cambiemos el pico más alto ocurrió en abril de 2016, cuando desembarcó Uber a la Ciudad y los taxistas realizaron numerosos cortes que generaron un gran caos en Buenos Aires. Además, hubo una multitudinaria marcha de las cinco centrales obrera que se manifestaron en contra del impuesto a las ganancias, de la inflación y también de los despidos.
Entre los eneros más complicados de los últimos años figura también el de 2014, cuando hubo 436 manifestaciones. Piquetes de vecinos por falta de luz a un promedio de 12 por día, el bloqueo durante ocho días de la autopista Illia por desalojo en la Villa 31 y distintas marchas sindicales.
Más conflictos a la vista
Organizaciones sociales y grupos piqueteros adelantaron que en febrero y marzo de este año habrá movilizaciones programadas con el fin de exigir obra pública para las cooperativas y una urgente atención a lo que califican como una situación de emergencia alimentaria, en el marco de una relación "muy tensa" con la administración del presidente Mauricio Macri.
"En la medida que el Gobierno no resuelva la continuidad de las cooperativas, en los próximos meses van a seguir las manifestaciones", alertó Gildo Onorato, secretario de Políticas Sociales del Movimiento Evita.
Onorato también se refirió a la ley de Emergencia Social-votada en diciembre de 2016 y reglamentada en marzo de 2017- y pidió que aumenten los subsidios para los más chicos. "El Gobierno ofrece $12,90 por pibe a los merenderos, cuando en los comedores escolares de la provincia la cifra es 40$", remarcó.
A su vez, Daniel Menéndez, referente de Barrios de Pie, anunció que además de las ollas populares que van a oragizar el próximo 15 de febrero, las organizaciones sociales se sumarán al paro de Camioneros, que finalmente tendrá lugar el 21 próximo.
Además, el secretario general de La Bancaria, Sergio Palazzo, convocó a un paro de 48 horas, a partir de ayer, en rechazo a la reforma de las jubilaciones en la entidad. También anunció dos días de huelga para la semana próxima.