“Mauri, mandale un besito a Bielsa”

Postales del comando electoral de Macri

24 de octubre de 200502:17

La barra brava de Mauricio

No tenían bombos ni vestían la camiseta de Boca Juniors. Identificados con remeras celestes con la frase "Yo soy Pro" en la espalda, los jóvenes macristas se encargaron de animar una tarde en la que la espera por los resultados y por el discurso del diputado electo se volvió por momentos tediosa. Equipados con ruidosas cornetas celestes y blancas esperaron a su líder mientras intercambiaban sonrisas cómplices y optimismo mudo por los resultados.

Saltaron cada vez que sonó el himno de campaña y hasta se animaron con un clásico de la cancha: "Y ya lo ve, y ya lo ve, es para Bielsa que lo mira por TV". Escucharon atentos el discurso de Macri y apenas éste despareció tras una puerta se lanzaron a festejar al ritmo de las canciones de Los fabulosos cadillacs y Los auténticos decadentes que llegaban desde los parlantes a todo volumen.

Catering bilingüe

Los comandos de campaña de Macri suelen gozar de buena fama por la comida que allí se sirve. Y esta vez, no fue la excepción. Hubo gaseosas, té, café, sandwiches de varios gustos, alfajorcitos y masitas. Ya entrada la noche, llegó un refuerzo de empanadas de carne y hasta un postre de frutillas con crema. Y un cuidado detalle: los carteles que anunciaban las opciones de bebida tenían la traducción correspondiente en inglés.

Un besito para Bielsa

Macri tuvo que interrumpir su discurso en varias oportunidades. Primero fueron las sonoras irrupciones de los jóvenes, que con sus cornetas, cerraron casi cada una de las frases del líder de Pro. Desde atrás de las cámaras y subida a una banqueta, una militante logró llamar su atención. "Mauri, mandale un besito a Bielsa", gritó. Desde el estrado, Macri alzó la vista, pero evitó responder.

En tono conciliador, el diputado electo quiso acallar los silbidos que la mención del canciller generó en el público. "Eso no es Pro", les dijo a sus seguidores en tono de reto mientras pedía silencio con un gesto de los brazos.

Simulador y... ¿macrista?

Salía apurado por un costado del salón cuando LA NACION LINE lo interceptó. "Vine a saludar a Mauricio, a darle un abrazo, es un amigo", dijo sonriente el actor Martín Seefeld casi sin detenerse. Vestido con una campera marrón, el protagonista de "Los simuladores" siguió camino sin dar más detalles.

El falso balcón

En el frente del búnker, un gran cartel con la sigla Pro ubicado en el balcón del primer piso llamó desde temprano la atención de quienes llegaban al lugar. En algún momento de la tarde, corrieron rumores sobre la posibilidad de que el candidato diera su discurso desde allí, en las alturas, al mejor estilo Casa Rosada. Finalmente, habló desde el escenario dispuesto en el fondo del salón con una pantalla gigante a sus espaldas.

Antídoto repetido

A las siete de la tarde, cuando una mezcla de impaciencia y euforia empezaba a palparse en el aire, el búnker quedó casi a oscuras. Como un antídoto para la espera, en la pantalla gigante empezó a proyectarse un video que combinaba imágenes de los films "Mi nombre es Sam" y "La sociedad de los poetas muertos" con discursos de Macri y spots de campaña.

La película incluía un resumen del triunfo del personaje que encarnó al presidente de Boca en la sátira televisiva "El gran cuñado", del programa de Marcelo Tinelli. "Y el ganador es... Mauricio Macri", exclamó el conductor desde la pantalla, como un avance de la euforia que se desataría un rato después. La proyección se repitió, sin modificaciones, una hora y media más tarde.

Al ritmo de Italia 90

Las referencias al mundo futbolístico fueron pocas. Tal vez la más pintoresca fue una versión "macrista" del himno del mundial de Italia 90, "Un estadio italiano". "No te imaginas/quien podés ser vos/en tu tierra/querida Argentina" , cantaron con los brazos en alto los jóvenes Pro cada vez que sonó la canción.

Moria, la diosa

Repartió elogios entre aliados y adversarios. A López Murphy le agradeció por haber librado una "valiente batalla", a Carrió, por protagonizar una campaña limpia y a Bielsa, en medio de silbidos, por el "coraje" para defender los logros del Gobierno. La mejor parte se la llevó, si duda, Moria Casán. "Y a la diosa de Moria", dijo Macri en la enumeración de agradecimientos al resto de sus rivales.

Candidatos, en pleno

Entre los hasta ayer candidatos de Pro que desde temprano circularon por el búnker, estuvieron Paula Bertol, con un impecable traje blanco y zapatos verde manzana, y el médico Lorenzo Borocotó, segundo y tercer postulante de la lista de diputados nacionales respectivamente. También se lo vio al legislador porteño Diego Santilli.

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