Para Leonardo Fariña, hay un operativo en su contra con un "clarísimo objetivo electoral"
El arrepentido Leonardo Fariña sostiene que es víctima de una "operación burda". "Es clarísimo el objetivo electoral que tiene este ataque", opinó, y sostuvo: "Como se ven con una cierta probabilidad de dar batalla o de ganar la elección, cambian radicalmente el discurso y dicen que son todos presos políticos", sostuvo.
Según dijo, el objetivo del kirchnerismo "es erosionar la imagen del plan de transparencia que planteó el gobierno actuar" y "desarmar las causas en las que están involucrados de lleno". En línea con esto, opinó que buscan atacar a los arrepentidos "para quitarle robustez a las causas de corrupción" y que "quieren instaurar que si los condenan es culpa de una justicia macrista y corrupta".
Tal como resaltó Fariña, tienen "argumentos para seguir siendo mártires", como el decir que son "las minorías quienes pelean por el pueblo". Y arremetió: "Es un discurso que va guiado a las clases bajas pero recitado por multimillonarios. Son todos tipos que no tienen menos de mil millones de dólares".
Para Fariña, intentan quebrarlo: "De los tres años y un mes que llevo en libertad, sufrí seguimientos, me sacaron fotos, hicieron dos atentados y, según dicen, en uno se dispararon 108 balas y hubo un muerto. Por culpa de estas maniobras, tuve que exponerme a alternar constantemente los domicilios donde estuve".
Fariña contó que desde medios como C5N y Página 12 intentan limar sus pilares en un contexto en el que él busca reinsertarse en la sociedad. "A diferencia de ellos, yo voy con la verdad, y la verdad se puede comprobar en un juzgado", sentenció, y agregó: "Teóricamente todos los que me habrían guionado son K".
Si bien reconoció que "cometió muchos errores", consideró que ya "pagó las consecuencias", y resaltó: "Siento un enorme orgullo por haber colaborado en las causas. Las causas hablan por sí mismas y las cuestiones probatorias de lo que dije están hechas".
Polémica por la abogada "G"
Por otro lado, el entrevistado habló de la abogada "G", Florencia Guijo, quien dijo ante los medios que lo entrenó para armar su declaración como arrepentido. Sin embargo, Fariña juró "por la vida" de su hijo que no sabe quién es. "Tengo alrededor de 47 horas de declaraciones indagatorias en las causas, ¿ustedes se piensan que con una hora y seis mails me podes coachear para que declare 47 horas?", cuestionó.
Además, enfatizó: "Él que manda a esta chica es Franco Bindi (exabogado de Fariña y actual abogado de Lázaro Báez) y el contacto que hace ella para llegar a la televisión es Giselle Robles, quienes teóricamente no se conocían". Y denunció que Bindi estuvo prófugo en Brasil por el secuestro de un menor.
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