Puricelli se hizo responsable por la complicación de la Fragata

"El responsable de la Fragata es el Ministerio de Defensa. La planificación del viaje fue del ministerio, a partir de una propuesta de la Armada, y la escala en Ghana se decidió como un acercamiento político a África", reconoció ayer el titular de Defensa, Arturo Puricelli, en la primera explicación oficial sobre cómo se definió el itinerario del viaje de instrucción de la Fragata Libertad.

Puricelli asumió, así, la responsabilidad por el escándalo de la unidad naval retenida desde el 2 de octubre en Ghana por decisión judicial, a raíz de la deuda que el país mantiene con los bonistas .

En contraste con el silencio que mantuvo a lo largo de este mes, desde que la Fragata no puede moverse del puerto de Tema, Puricelli habló por dos radios a la mañana, horas después del arribo de 281 tripulantes al aeropuerto de Ezeiza, en un vuelo chárter contratado por el gobierno de Cristina Kirchner. "La Fragata va a volver a la Argentina. No vamos a permitir que los fondos buitre manoseen la dignidad del pueblo argentino. A veces, la Justicia tarda, pero llega", aseguró el ministro, en una visita que hizo al mediodía a unos 40 cadetes en el Apostadero Naval Buenos Aires, a quienes les prometió hacer gestiones políticas con Ghana para acelerar la repatriación del buque escuela de la Armada, que sigue en el puerto africano con 44 tripulantes.

"Vamos a traer la Fragata al suelo patrio y la amarraremos a nuestro continente", señaló el ministro, al negar que el Gobierno tenga la intención de "entregar la Fragata". Aunque no dio fechas, prometió que él mismo convocará a la tripulación, que "irá a buscar a nuestro buque escuela".

Enfrentado con el canciller Héctor Timerman, el ministro de Defensa había quedado debilitado la semana última en el Gobierno, al tener que desprenderse sucesivamente del jefe de la Armada, almirante Carlos Alberto Paz, y de la directora de Inteligencia Militar de su ministerio, Lourdes Puente Olivera, a raíz del conflicto, que ya lleva 24 días.

En ese complicado escenario internacional, Puricelli admitió que el Gobierno "está evaluando" la situación de la corbeta Espora, que podría ser también víctima de una acción de fondos buitre por la deuda en default. La nave se encuentra varada desde el 10 del actual por un desperfecto eléctrico sufrido cerca del puerto de Ciudad del Cabo, en Sudáfrica, con 105 tripulantes, mientras participaba en un ejercicio conjunto con buques de Uruguay, Brasil y Sudáfrica.

"La cuestión de las responsabilidades la define la Presidenta y yo asumo las que me corresponden", añadió Puricelli. Destacó, además, la decisión de Cristina Kirchner de repatriar a los marinos, porque "hace que nuestra capacidad de resistencia sea mayor".

Si bien asumió su responsabilidad por la abrupta interrupción del viaje de instrucción de la Fragata Libertad, el ministro de Defensa aclaró que la Cancillería participa, a través de consultas, de la definición del itinerario. Precisó al respecto que la escala en Ghana se decidió tras la advertencia del ministerio que conduce Timernam sobre los riesgos que implicaba atracar en Nigeria por "la falta de seguridad". Desligó, en tanto, al secretario de Comercio, Guillermo Moreno, de la decisión de ir a Ghana. "No tuvo ningún tipo de opinión", señaló.

Respecto del papel de la Cancillería, Puricelli dijo que "todos los países del mundo utilizan estos busques en función de sus necesidades de relacionarse internacionalmente y diplomáticas".

"Se decidió, como una propuesta de acercamiento político a Sudáfrica, todo el circuito de Portugal, España, bajar por la costa de África y llegar a Sudáfrica el día 27, donde culminaba con una visita mía a Sudáfrica", explicó, al justificar el trayecto diseñado.

En tanto, las autoridades del puerto de Tema reclamaron ante el Tribunal Comercial de Accra que la Fragata Libertad sea trasladada a otro sector de la terminal. Dijo que la ubicación de la nave argentina genera "complicaciones" en el principal punto de acceso marítimo comercial a Ghana y que en las últimas horas había "veinte navíos comerciales esperando para atracar".

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