¿Quién es la nueva becaria Néstor Kirchner?

"Que estemos entregando esta beca por segunda vez nos reafirma que el legado de Kirchner está vivo y más fuerte que nunca". La frase pertenece al jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, y fue pronunciada la semana pasada, cuando se anunció el nombre de la ganadora de la beca Néstor Kirchner en su segunda edición.

Se trata de Cecilia María Minaverry, una abogada de 31 años que desde hace ocho trabaja en la AFIP: primero en la ciudad de Buenos Aires y desde hace poco en Córdoba. Especialista en derecho tributario y máster en Estudios Internacionales por la Universidad del País Vasco, ganó la beca, inspirada en la figura del ex presidente, por una investigación sobre Tratados Bilaterales de Inversión (TBI) y sobre el Centro Internacional para el Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), el organismo del Banco Mundial en el que se dirimen los arbitrajes entre los Estados y las empresas transnacionales y en el que la Argentina tiene varias demandas pendientes.

El Ciadi es uno de los organismos internacionales más cuestionados por el Gobierno. En mayo pasado, el embajador argentino en Washington, Jorge Argüello, dijo que en el Ciadi "hay mala información y, en muchos casos, prejuicio y mala fe". El diplomático integra el comité evaluador de la beca.

Minaverry viajará a Nueva York en noviembre próximo. Durante dos semanas, en la New Schoool University, que organiza la estadía de trabajo junto con la Universidad Nacional de San Martín, presentará su trabajo ante alumnos y docentes, se entrevistará con líderes políticos y sociales y visitará organismos gubernamentales, museos y bibliotecas.

Según consta en el sitio web que la promociona, la beca está inspirada en "el legado y los logros" del ex presidente, tanto durante su gestión al frente del Poder Ejecutivo como en su "importante tarea" como jefe de la Unasur y está orientado a la "formación y promoción de líderes políticos progresistas en la Argentina y América del Sur".

Minaverry supo de la existencia de la beca pocos días después de que se abriera la convocatoria. Cuando vio que cumplía con todos los requisitos (tener al menos cuatro años de antigüedad en la administración pública o en una ONG, haber terminado estudios de postgrado y hablar inglés fluido) decidió que haría el intento. "Mi tema de estudio se ajustaba a lo que pedían y me parecía interesante la oportunidad, el viaje, conocer la universidad, capacitarme, conocer gente y hacer contactos", enumera en diálogo con LA NACION.

Además de Minaverry ganaron la distinción otros dos profesionales latinoamericanos: Lucas Noura de Moraes Rego Guimaraes, un abogado brasileño que estudió "la integración energética a partir de fuentes renovables como medio para el desarrollo", y Roland Jeremy Álvarez Chavez, un sociólogo peruano que presentó un ensayo sobre "violencia estructural y sus consecuencias en la comunidad LTGB".

En los tres casos, la beca cubre los pasajes de ida y vuelta, los gastos de alojamiento y 1000 dólares en concepto de "honorarios y gastos de subsistencia".

"Selección transparente"

Conciente del "peso" del sello de la beca que la llevará a Nueva York, Minaverry se apura a aclarar que no milita ni militó en ningún espacio político y reafirma: "Soy testigo de que esto no tiene que ver con ninguna militancia y es totalmente transparente. Más allá del nombre que eligieron, la realidad es que en la función pública uno no tiene muchos estímulos. Por eso está bueno destacar a quienes siguen formándose y no se quedan con la idea de que están fijos en un trabajo y que no los pueden echar", ahonda.

Cuando se le pregunta por el legado de Kirhcner, la joven no duda. Destaca los "avances" en materia de "promoción de la juventud" y dice estar "de acuerdo" con cómo el Gobierno se manejó hasta ahora en esa área. "Me parece bien que se nos involucre, tanto en cuestiones políticas como de formación", asegura. Sin embargo, prefiere no opinar sobre La Cámpora y la última polémica en la que la organización kirchnerista se vio envuelta a partir de su irrupción en escuelas. "No puedo opinar del tema porque no estoy involucrada ni he leído lo suficiente", se excusa.

"Esta beca no fue una idea del gobierno argentino o de la universidad argentina. Fue una idea que me propusieron a los pocos días de ese terrible hecho que fue la muerte de Néstor", dijo Abal Medina el día que se entregaron las distinciones.

Aquella idea cumple casi dos años y ya se cristalizó en dos generaciones de becarios. Una de las manifestaciones del "legado" de Néstor Kirchner.