Rico aún no renunció y sigue en su despacho
Si bien evitó hablar en público, el ministro de Seguridad bonaerense hizo saber que no dimitirá hasta que el gobernador Ruckauf se lo pida; críticas del vicepresidente.
Pese a que fue el propio gobernador bonaerense quien le hizo saber que esperaba su renuncia al gabinete provincial, el ministro de Seguridad, Aldo Rico, no se movió ayer de su despacho.
"¿Por qué va a presentar su renuncia si nadie se la pidió?", se preguntó, con tono casual, Horacio Poggi, jefe de prensa del ex militar. El mensaje del gobernador Carlos Ruckauf, emitido desde los Estados Unidos, ya había llegado.
"Nadie gobierna con señales. Si Ruckauf quiere separar a un ministro lo dice y punto", siguió Poggi. E insistió: "El ministro de Seguridad se llama Aldo Rico".
Lo cierto es que ni Rico ni ningún otro funcionario del gabinete bonaerense quisieron ayer hablar en público sobre su inminente salida del gobierno provincial.
Ruckauf esperaría hasta el sábado para exigir personalmente la renuncia. Entretanto, el ex líder carapintada decidió continuar con su agenda oficial como si nada hubiera sucedido. Pasado mañana asistiría al municipio de Malvinas Argentinas, desde donde el intendente, Jesús Cariglino, buscaría articular un grupo de jefes comunales que respalden a Rico.
La crisis planteada en el gobierno de la provincia se originó hace una semana a partir de la intención de Rico de vincular, erróneamente, al presidente Fernando de la Rúa con un ex militar carapintada, Carlos "El Indio" Castillo.
En la Casa Rosada, en tanto, se interpretó que la designación de Rico fue "el primer traspié político" de Ruckauf.
"Nunca entendimos esa designación", dijo el vicepresidente Carlos Alvarez, antes de definir a Rico como "un ex golpista que expresa los costados más negativos de la Argentina".