Silencio del FMI frente a las nuevas medidas económicas
WASHINGTON.- El anuncio de la suspensión del pago de la deuda externa llamó más la atención de los medios en Washington que la elección del nuevo presidente argentino Adolfo Rodríguez Saa.
Pero ninguna autoridad del Tesoro, el Departamento de Estado, la Casa Blanca o el Fondo Monetario Internacional quiso comentar ayer ese anuncio.
En parte porque se esta en vísperas de Navidad en esta ciudad; en parte, quizá, porque no se puede medir la credibilidad del anuncio.
"No vamos a hacer comentarios por ahora", señaló a LA NACION Claudio Loser, director del Fondo Monetario Internacional para el Hemisferio Occidental, aunque reconoció que se está siguiendo atentamente lo que sucede en Buenos Aires.
Con el organismo sin funcionar hoy y durante el día de Navidad, sólo se espera una reacción oficial a las medidas que tomó el flamante gobierno justicialista para pasado mañana.
También los voceros del departamento del Tesoro, a cargo de Paul O´Neill, declararon que se aguardan más detalles de la nueva política económica del gobierno justicialista interino de la Argentina antes de hacer algún tipo de comentarios.
La elección de Adolfo Rodríguez Saá como presidente de la República Argentina por la Asamblea Legislativa mereció los comentarios de rutina.
Voceros de la Casa Blanca y el Departamento de Estado expresaron el agrado de su gobierno por la exitosa transición democrática argentina, reiteraron la confianza en las instituciones democráticas y afirmaron que Estados Unidos le deseaba bien al nuevo presidente de nuestro país.
Ideas fuerza
Voceros de de esas instituciones repitieron ayer las ideas "fuerza" que en estos días constituyen el mensaje básico que el gobierno norteamericano transmite a la Argentina: que se una políticamente para apoyar un programa económico sostenible y que trabaje con las instituciones financieras internacionales, el Tesoro y la comunidad internacional para encontrar una solución a la crisis.
Sin embargo en ningún lado se encuentra una descripción oficial de esa solución.
Se ha mencionado en Buenos Aires un memorando con recomendaciones para el gobierno argentino que en esencia desarrollaría los conceptos de apoyo político, reestructuración y aun devaluación de la moneda.
Ayer, Fred Jones, un vocero del Departamento de Estado no pudo confirmar la existencia de ese documento. Pero se pudo chequear independientemente que existe un trabajo de esa naturaleza que refleja con algún detalle el pensamiento de Washington sobre los problemas del país, aunque no sería exactamente un documento del Departamento de Estado.
Extraoficialmente, la preocupación con la política argentina continúa en Washington.
¿Por qué no pueden elegir un presidente para terminar el período de De la Rúa? ¿Por qué tienen que abrir nuevos interrogantes sobre lo que va a pasar en el futuro? ¿Con quién se puede negociar en su país? Estas son las preguntas que subyacen en muchas conversaciones.
Por ejemplo, ayer Mark Falcoff, historiador y experto en América latina del American Enterprise Institute, un centro de estudios con estrechas relaciones con el gobierno de Bush, expresó su agrado por la elección y mucha preocupación porque resuelve tan poco.
La hora cero
"Ha llegado la hora cero para la Argentina y la clase política tiene que unirse en esta emergencia. No entiendo esa elección dentro de tres meses -dijo-, ¿qué significa? ¿Habrá en los próximos tres meses un verdadero debate sobre las opciones que enfrenta el país? Ojalá sea así."
"Estoy seguro -agregó Falcoff- de que el Tesoro, el FMI, el Grupo de los 7 y España tienen interés en estabilizar la situación, por lo tanto, creo que el nuevo equipo económico será escuchado en Washington Bruselas y Madrid. ¡Pero los ministros que irían a negociar terminan su mandato en marzo! ¿Cómo pueden negociar acuerdos que por su propia naturaleza se extenderán más de tres meses?
Otro observador dijo ayer que la Argentina tenga cuidado: "En el Tesoro se tiene en cuenta al país, pero necesita un gobierno serio, bien apoyado políticamente, con propuestas serias, para que éstas puedan a su vez ser seriamente consideradas".
De lo contrario, la Argentina, que ya está económicamente marginada, "corre peligro de transformarse en un paria político".
Quizá sea una exageración. Pero estos comentarios indican que la Argentina todavía sigue en un proceso de deterioro de imagen y el reemplazo de un presidente por otro no cambia esa situación.
No se pudo obtener ayer en Washington una confirmación acerca de un viaje inminente de una misión argentina.
Por su parte, autoridades del Fondo Monetario Internacional dijeron que el organismo de crédito estará cerrado hasta pasado mañana.
En la embajada Argentina no había ningún tipo de novedad ayer respecto de la posibilidad de que en los próximos días llegue una misión para negociar nuevas condiciones en el pago de la deuda.
Más leídas de Política
Directores. El despido de 13 funcionarios de rango abre una crisis en la Secretaría de Trabajo
"Imbéciles". Dura arremetida de Milei contra gremialistas que quisieron entrar por la fuerza a oficinas del Estado
Antes de la marcha. El Gobierno anunció un aumento de fondos a universidades por “consenso”, pero fue desmentido