Tras el freno a la ley de medios, Kirchner tildó a la prensa de "cobarde y antidemocrática"

Casi en simultáneo, Cristina y Néstor Kirchner aprovecharon sus respectivas apariciones públicas para lanzar durísimas críticas a la Justicia y a los medios. Fue pocas horas después de que un juez ordenara suspender dos artículos de la nueva ley de medios.

"La Justicia debe ser independiente no sólo del poder político de turno sino de los poderes económicos, que nunca son circunstanciales sino que son permanentes y a los que nadie vota".

La Presidenta habló así del Poder Judicial en el acto de inaguración de la ciudad judicial de Santa Rosa y la ampliación de la Unidad Penal 4 del Servicio Penitenciario Nacional.

"Muchas veces leemos rimbombantes palabras, grandes arengas, acerca de que los jueces deben tener independencia de los poderes políticos de turno. Es correcto, pero también y hoy más que nunca deben ser independientes de los poderes económicos, que son permanentes y a los que nadie los vota nunca", sostuvo.

"Poder de lobby". "Es importante reafirmar este verdadero rol de la Justicia. Porque son precisamente los más vulnerables, los trabajadores, los pequeños, los que normalmente carecen del poder de lobby para obtener medidas, política, legislación o sentencias. Es allí donde el rol de la Justicia adquiere su verdadera dimensión humana", planteó la Presidenta.

Enseguida, Cristina Kirchner se preguntó "cómo obtienen justicia los más débiles". Su respuesta fue: "Cuando los poderes del Estado articulan un proyecto de país donde la distribución se hace más justa y equitativa para todos sus habitantes". Inmediatamente dijo que ese proceso comenzó en 2003, con el mandato de su esposo Néstor Kirchner.

"No es fácil mantenerse de pie ante tanta zancadilla y tanta presión, sobre todo cuando una está arriba de un par de tacos. Sin embargo, acá estamos de pie los argentinos, y lo vamos a seguir estando. ¡Por un 2010 mucho mejor!", arengó.

"No tuvo miedo". Desde Corrientes, donde encabezó un acto del Sindicato de Luz y Fuerza, Kirchner fue lapidario y directo en sus acusaciones. "La Presidenta tocó algunos intereses poderosos y no tuvo miedo a pesar de los ataques del Grupo Clarín", lanzó.

Con los brazos en alto, añadió: "Todos los argentinos tienen que saber que estos grupos nos atacan porque la Presidenta defiende los intereses de los argentinos y no de los grupos económicos".

Fue entonces cuando acusó a los medios de tener "una actitud cobarde y antidemocrática".

No se detuvo allí. "Habrá una Argentina democrática cuando se respete la opinión de informar con libertad. Pero si quieren seguir, que sigan. No importa: largas batallas ha dado el pueblo argentino", desafió.

Hacia el final, en medio de fuertes elogios a la gestión de su esposa, aseguró que "uno de los instrumentos fundamentales para la democratización" fue la sanción de la ley de medios.

Ante un recurso de Clarín, el juez civil y comercial Edmundo Carbone emitió una medida cautelar que suspendió los artículos 41 y 161 de la ley de medios. Son los que obligan a los grupos empresarios a vender compulsivamente en el plazo de un año las señales de radio y televisión que excedan el número permitido en la ley sin invocar derechos adquiridos.