Tras las acusaciones de Cristina Kirchner, Daniel Scioli negó una "ruptura" con el Gobierno
El gobernador defendió su gestión y aseguró que sólo busca "romper con las injusticias, el paco, las mafias y la inseguridad"; insinuó trabajar en un proyecto político de largo plazo
Daniel Scioli no hizo oídos sordos a los duros ataque que lanzó el jueves pasado la Presidenta sin nombrarlo, pero negó una "ruptura" con el Gobierno.
Consciente del peso de sus dichos dos días después del acto en Lomas de Zamora que protagonizó junto con Cristina Kirchner y el intendente Martín Insaurralde, el gobernador bonaerense visitó hoy Tandil y expresó: "Había mucha expectativa de mi presencia aquí a ver qué definición daba, que iba a romper... Pero yo voy a buscar romper lo que busco romper desde el primer día de la gestión y que tiene que ver con las injusticias, con las cocinas de paco, con las mafias de los desarmaderos, seguir dando esta lucha sin tregua contra la inseguridad".
Según consignó la agencia DyN, Scioli ratificó su "vocación de servicio" e insinuó trabajar en un proyecto político de largo plazo. "Cuando uno gobierna tiene que mirar la coyuntura pero también hay que mirar lejos", consideró. El año pasado ya había declarado públicamente sus intenciones de ser presidente en las próximas elecciones generales.
De hecho, esta mañana, la agrupación sciolista "La Juan Domingo" desembarcó en Bahía Blanca y su referente, el senador provincial Osvaldo Goicoechea, señaló que el mandatario es el que "hombre que mejor nos representa para el 2015".
"Cuando uno gobierna tiene que mirar la coyuntura pero también hay que mirar lejos", afirmó Scioli
Tras rechazar las versiones de un posible "ruptura", Scioli no se movió de su discurso conciliador. Sostuvo que tiene "16 millones de jefes" y destacó su espíritu de "colaboración y no de confrontación, para pacificar y unir".
La referencia a los "16 millones de jefes" parecieron una respuesta a los dichos de Cristina, que visiblemente molesta en el discurso del jueves lanzó: "Siempre es más fácil y más cómodo decir palabras de ocasión, siempre es mucho más fácil. Nada más fácil que quedar bien con todos y tener un millón de amigos".
Y haciendo casi una descripción del concepto que muchos tienen de Scioli, la jefa de Estado expresó: "Imagínense a ese tipo de dirigentes frente a corporaciones como el Fondo Monetario".
Scioli debió ayer enfrentar la embestida que le propinaron ultrakirchneristas como el diputado Carlos Kunkel y la flamante titular del bloque del Frente para la Victoria en la Cámara baja, Juliana Di Tullio.
Mientras Kunkel desafió al mandatario a competir en las próximas elecciones con "una lista alternativa", Di Tullio le exigió que "aguante los trapos" por la Presidenta.
Anoche, el otro hombre fuerte de La Juan Domínguez y senador bonaerense, Baldomero "Cacho" Alvarez, salió a defender a Scioli de las críticas kirchneristas y, al manifestarse en contra de los "alcahuetes", puso en duda que "los argentinos hayan votado a la Presidenta para que se sienta con el derecho de castigar a un gobernador que tanto puso al servicio de la patria". En su réplica, el legislador lamentó que en el "Gobierno (nacional) sienten que el diálogo y la fraternidad no sirven y sólo creen que se puede construir desde la pelea y que la confrontación es el camino".