Tratan de lograr un mayor ahorro financiero
Economía planea hacer una serie de subastas para los Boden 2012 y para otros títulos soberanos emitidos luego del default
El Ministerio de Economía plantea hacer una serie de subastas para lograr un ahorro en el pago de bonos performing a partir del fondo que se integrará con las reservas del Banco Central.
El ministro de Economía, Amado Boudou, explicó a LA NACION que en los próximos días se realizaría la primera licitación por los Boden 2012. "Si vienen muchos a la subasta, va a ser un éxito por el ahorro que se pueda obtener; y si vienen pocos, también será positivo porque ratificará la confianza en la capacidad y la voluntad de pago", dijo el funcionario, entusiasmado ante este resurgimiento de la agenda financiera que parecía anestesiada.
La idea es aplicar una tasa de descuento que podría rondar el 3%.
El Ministerio de Economía precisó que los vencimientos del año próximo incluyen unos US$ 2592 millones, correspondientes a tenedores de Boden en pesos y en dólares, 2187 millones de dólares de organismos multilaterales, 530 de préstamos garantizados, 500 de tenedores de Bonar, 451 millones de Bonos de Descuento y 308 millones de dólares de Bonos Par. Según la respuesta de los inversores, se avanzará con otros bonos de este menú.
"En la hipótesis de máxima, la idea es llegar a tener un ahorro por una suma equivalente al monto que se transfiere del Banco Central al Tesoro", explicó una fuente de Economía.
En términos conceptuales, la intención es "aprovechar la mejora en el panorama financiero para el país que servirá tanto para pagar los vencimientos, bajar el costo del dinero fresco que forma parte del canje y de la nueva emisión contemplada luego de esta operación", agregó. Al destacar la conveniencia de estas subastas en lugar de los canjes analizados tiempo atrás, Boudou destacó que "así logramos profundizar el desendeudamiento en lugar de postergar pagos".
El Club, el próximo
Además, el ministro aseguró que en los próximos días podría haber un anuncio que resucite la negociación formal con el Club de París, un grupo de países a los que no se les paga desde fines de 2001. El Gobierno estimó esa suma en unos US$ 6500 millones, aunque voceros del Club llegaron a estirar la suma a unos US$ 7900 millones.
Luego del fallido intento de pagar al contado del año pasado, ahora la intención oficial es realizar un pago financiado aunque, a diferencia de la mayoría de otros acuerdos del club, sin la participación del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Para eludir al organismo, el banco Lazard había ofrecido sus servicios como "asesor", proponiéndole a Boudou pagarle al club con un bono, pero luego la idea fue relativizada.
En tanto, los acreedores oficiales quieren ver una propuesta formal para opinar, luego del desencanto de 2008.