La eliminación del FOT y FOS causan polémica
Muchas urbes del mundo priorizan desde hace tiempo el desarrollo edilicio densificado y concentrado, todo en pos de una sostenibilidad que persigue maximizar la infraestructura preexistente y economizar recursos, concepto que cuenta con el aval de diferentes normas internacionales focalizadas en lo sustentable. Pero la búsqueda de eficiencia no se centra solo en los edificios, sino también en lo urbano y para mejorar la calidad de vida e impulsar sectores relegados en el tiempo; pero con perfil de potencialidad futura. En parte, sobre estos items se centrará el debate a partir del nuevo Código, que seguramente como todo cambio, dará lugar a polémicas a partir de la regulación edilicia con la aplicación de unidades de sustentabilidad por densidad de altura, que será restrictiva para la localización de las grandes torres, junto a la novedad en la eliminación del FOS y del FOT. Se viene un código más restrictivo que generará resistencia y contrapuntos entre los desarrolladores que aspiran a generar complejos de gran escala, frente a otros que priorizan conservar una escala urbana más homogénea, intentando evitar a futuro las aberraciones que presenta el tejido actual, producto también de la especulación. Por otro lado, resulta interesante la inserción de una compensación de m2 cuando un desarrollista adquiera un edificio bajo protección patrimonial, los que serán “trasladables” a otros emprendimientos a partir del concepto de Transferencia de la Capacidad Constructiva (TCC) a zonas con potencialidad de desarrollo. Si bien “densificar” es acertado en términos de sostenibilidad, esto siempre en la medida que las políticas municipales impulsen la inversión necesaria en infraestructura para poder “absorber” una mayor densidad pero sin generar colapsos en el suministro de servicios; y, además, que sea aplicada en aquéllos sectores de la ciudad que realmente lo justifiquen y siendo siempre respetuosos de la idiosincrasia vecinal.
* El autor es Director de FC Bienes Raíces + Arte y asesor en Normas LEED
Fernando Calió
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