Ingredientes
- 2 tazas de garbanzos
- 6 cebollas medianas
- 2 ramas de apio
- 1 taza de crema de leche
- 1 cucharada de semillas de sésamo
- 1 chile pequeño
- 2 tazas de caldo de verduras
- 1 taza de vino tinto
- 3 cucharadas de azúcar
Preparación
- Dejar en remojo los garbanzos en 2 litros de agua durante 4 horas. Luego cocinar a fuego bajo hasta tiernizar y reservar.
- Hornear las cebollas enteras, con piel, por 1 hora; dejarlas enfriar y pelarlas.
- Rehogar el apio picado en unas gotas de aceite de oliva.
- Tostar un poco las semillas de sésamo y procesarlas con una cucharada de caldo de verduras.
- En una licuadora, procesar los garbanzos, el apio, 4 cebollas, el chile, caldo de verduras, sal y pimienta negra recién molida.
- Cuando la pasta esté lisa, colocarla en una cacerola, agregar la crema y la pasta de sésamo. Calentar a fuego bajo. Si fuese necesario, incorporar caldo caliente.
- Hacer un caramelo rubio y luego cubrir con vino tinto.
- Cocinar a fuego bajo hasta obtener una textura algo almidonada.
- Apagar el fuego y agregar las dos cebollas restantes cortadas en octavos. Servir la sopa con cebollas al vino tinto.
Por LA NACION recetas