¿Qué nos trae la Luna nueva en Acuario que inició el 1° de febrero?

El martes 1° de febrero ocurrió la Luna Nueva en Acuario, energía de aire que trae movimiento de cosas inesperadas, nuevas, vitales. Tenemos tres signos de aire en el zodíaco: Géminis, que está relacionado con la comunicación, luego Libra que es el momento donde nos encontramos con otros y hacemos amigos, pareja, sociedades y, por último, viene Acuario a traernos información nueva, reveladora que nos ayuda a dar esos giros que nos hacen crecer cuánticamente.

Todos tenemos un amigo acuariana que siempre trae ideas innovadoras, planes rarísimos (esos que nos hacen pensar: “¡Cómo se le ocurrió semejante cosa!”), pero de seguro amaste sumarte y te sorprendiste hasta de vos mismo de verte en esa escena. Y, como les solemos compartir, por más que no seas de Acuario todos tenemos un pedacito de este signo en nuestra carta natal que nos invita a resonar. Esta la Luna Nueva nos propone intencionar y semillar proyectos creativos, animarnos a dar saltos a lugares no conocidos y, a pesar de sentir incertidumbre sobre lo que va a venir, continuar motivadas para seguir avanzando y crear esa vida que nos imaginamos, más libre y sin tantas reglas.

La Luna nueva es como tener un cheque en blanco que podés completarlo con lo que deseás. Junto con la Luna y el Sol se encuentra Saturno, el planeta que colabora para llevar a tierra y concretar de verdad aquellas cosas que queremos. A su vez, Saturno dialoga con Urano y, aunque sentimos cierta tensión, entre ellos hacen que pensemos realmente qué queremos que quede en nuestra vida y qué dejamos ir. En esta tensión también hay una melancolía de soltar las estructuras antiguas y, posiblemente, nos resistamos a los cambios. La llave está en que aceptemos los cambios que vinieron para quedarse, les demos la bienvenida y no los resistamos. Esto permite que el proceso sea más liviano y también que el destino nos sorprenda. Pensar que podemos controlar todas las variables nos quita flexibilidad.

Mercurio sale de retrógrado el viernes 4 de febrero, así que ya podés firmar contratos y confirmar proyectos que venían retrasados. La comunicación interna con vos misma y externa se pone más fluida. Un detalle no menor es que Mercurio está en conjunción con Plutón, planeta de la transformación, así que estaremos con el radar de la intuición aguda con posibilidades de que aparezca o emerja información sobre algún secreto oculto o sobre alguna pieza que faltaba para poder comprender qué es lo que te estaba pasando.

Por último, ese mismo día, Neptuno y la Luna estarán unidas en Piscis, por lo que los invito a buscar momentos para relajar, conectar con el arte, escribir una poesía, hacer una caminata en un parque, meditar o hacer yoga. El cielo nos da este lindo respiro para poder conectar con nuestro interior y también, de esta manera, procesar, integrar y continuar preparándote para este hermoso año que recién comienza.