A sangre fría. Asesinaron a un sereno en Mar del Ajó

Intentó impedir un robo en la fábrica de hielo en la que trabajaba

10 de Enero de 2014

LA PLATA.- A menos de 24 horas de que el ministro de Seguridad bonaerense, Alejandro Granados, dijera que la sensación de inseguridad debían sentirla los delincuentes, el sereno de una fábrica de hielo fue asesinado de un balazo en el pecho al intentar evitar un asalto en la localidad balnearia de Mar de Ajó, en el Partido de la Costa.

Al cierre de esta edición, los investigadores policiales dijeron a LA NACION que estaban tras las pistas de los tres delincuentes que habían asesinado al custodio y que luego huyeron del lugar de los hechos sin concretar el robo.

Todo comenzó ayer, a las 0,20, en el depósito y fábrica de hielo Subcero, situada en la calle Espora 267, de Mar de Ajó. Allí, cuatro operarios que se encontraban trabajando fueron sorprendidos por tres delincuentes que le exigieron dinero de la recaudación, según confiaron fuentes policiales.

"Al parecer, los malhechores tenían algún dato que les indicaba que habría dinero en el lugar. Redujeron a los empleados y los ataron con precintos. Pero cuando los delincuentes intentaron detener el funcionamiento de la maquinaria utilizada para fabricar hielo, apareció el sereno para ver lo que pasaba.

Según trascendió de algunos testimonios no oficiales, el vigilador intentó evitar el asalto, pero fue atacado a los tiros por uno de los malvivientes. "Por lo menos uno abrió fuego y le pegó un tiro en el pecho", relató uno de los investigadores del crimen.

El sereno, identificado como Carlos Alberto Palacios, de 68 años, tras recibir el tiro se desplomó en el lugar mientras los delincuentes huían de la fábrica en un vehículo que, se presume, era robado.

Los operarios lograron liberarse, llamaron a la policía y al hospital, desde donde enviaron una ambulancia que llegó a los pocos minutos. Palacios fue trasladado al Hospital Municipal de Mar de Ajó, donde falleció pese al trabajo de los médicos que intentaron reanimarlo.

El jefe de la policía de la provincia de Buenos Aires, Hugo Matzkin, ordenó un operativo para tratar de ubicar a los tres delincuentes. Según testigos, los asaltantes se trasladaban en un vehículo Toyota negro.

Con este dato, los investigadores pidieron revisar las grabaciones de las cámaras de seguridad instaladas en Mar de Ajó a fin de determinar si en alguna quedó registrado el vehículo con tres ocupantes que aseguran haber visto los testigos.

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