Atraparon al presunto responsable de la muerte de un oficial porteño

Un joven de 18 años fue detenido ayer y quedó acusado de ser el autor material del asesinato del policía de la Ciudad Sergio Atilio Valenzuela, cometido en junio último en la localidad bonaerense de La Tablada.

Con el arresto de ese adolescente, suman ocho los apresados en esa investigación, según informaron fuentes policiales.

La detención, a cargo de efectivos de Homicidios de la Policía de la Ciudad, se realizó en una vivienda en el asentamiento conocido como Ciudad Oculta, en el barrio porteño de Villa Lugano, donde el sospechoso se ocultó tras el crimen.

Los voceros dijeron que ese arresto se suma al de otras siete personas en el marco de la misma causa, a quienes se les imputa conformar una banda de delincuentes que cometía robos a mano armada en el conurbano, pero que vivía en la zona sur de la ciudad de Buenos Aires.

El nuevo detenido quedó alojado en una sede policial porteña a disposición de la Justicia y fue acusado de "robo agravado por el uso de arma de fuego en concurso real con homicidio agravado criminis causa". Las demás detenciones fueron realizadas en anteriores allanamientos en los barrios Ciudad Oculta, Comandante Piedrabuena y Cardenal Samoré, en el sur de la ciudad.

El crimen del oficial primero Valenzuela ocurrió en la mañana del 12 de junio último cuando el policía, vestido de civil, retiraba su Chevrolet Cruze del garaje de su casa, en O'Gorman al 900, en la localidad de La Tablada, en La Matanza.

Cuando Valenzuela cerraba el portón de la casa para ir a su trabajo en la comuna 11, el efectivo fue abordado por al menos tres delincuentes armados que se bajaron de un auto con fines de robo.

Los voceros estiman que, como el agente no llevaba puesto el uniforme, los asaltantes no supieron que se trataba de un policía hasta que extrajo su arma reglamentaria con intenciones de resistirse al robo.

En esas circunstancias se produjo un tiroteo, en medio del cual el oficial recibió cinco impactos de bala en distintas partes del cuerpo y cayó muerto.

Su pareja, que vio toda la secuencia desde el interior de la casa, fue quien alertó a la policía de La Matanza mediante una llamada al 911. Tras el ataque, los ladrones se escaparon tras robar el arma reglamentaria del policía.