Denuncias de abuso en un jardín de infantes de Belgrano
Dos madres acusaron a maestras de un establecimiento educativo de haber sacado fotos de sus hijas desnudas, quienes asistían a la sala de 3 años
Ayer a la tarde se desató un escándalo en las puertas de un jardín de infantes del barrio de Belgrano, cuando dos madres se presentaron para protestar por un supuesto caso de abuso de sus hijas de tres años y se enfrentaron con otros padres que pretendían defender a las maestras involucradas.
La confrontación fue presenciada por los niños, que al salir del jardín, que depende del gobierno porteño, se encontraron con una escena de tensión de padres que se insultaban entre sí y decenas de periodistas y cámaras de televisión que cubrían las dramáticas escenas.
Lo que desató esta situación fue una denuncia presentada por dos madres, Yesenia Manzuelos y Valeria Gómez, que aseguran que dos maestras y un celador del jardín Athos Palma, en Sucre 2284, abusaron sexualmente de sus hijas, que asistían a la sala de 3 años.
Esta denuncia se suma a dos casos más de supuestos abusos y maltratos cometidos en jardines de infantes en lo que va de 2013. El primero en salir a la luz fue el del jardín Tribilín, de San Isidro, en febrero pasado. El segundo ocurrió anteayer en el establecimiento educativo Gauchos Argentinos, de Florencio Varela.
Joaquín Olivera Costa, el abogado de ambas querellantes, afirmó a la agencia de noticias DyN que las madres denuncian que las niñas fueron fotografiadas desnudas mientras las manipulaban con un juego de títeres.
Ayer se presentaron Manzuelos y Gómez en el jardín de infantes, acompañadas por una decena de amigos y familiares, para reclamar que se esclarezca el caso. Allí se encontraron con unos 40 padres que esperaban retirar a sus hijos del establecimiento. Los padres se expresaron mayormente a favor de la escuela y de las maestras, y varios enfrentaron a Gómez y a Manzuelos, por lo que la salida del jardín se transformó en un momento de tensión en el que se mezclaron gritos, insultos y llantos de niños del jardín, quienes presenciaron todo.
"Hace cuatro años que conozco la escuela, he venido a cada reunión y a cada acto. Nunca vi nada raro y mi nieto viene encantado. Son todas mentiras", afirmó Alicia Antico en medio de la confrontación. Otra madre, que prefirió no dar su nombre, pero que tiene un hijo en sala de 5, afirmó a la nacion: "Esto es un invento. Les deberían hacer un peritaje a esas mujeres, porque nadie les cree. Yo soy madre y sabría si hubiera pasado algo raro". Otra señora afirmó: "El año pasado, cuando faltó la maestra, mi hijo se largó a llorar, porque quieren mucho a sus maestras. Por eso, esto que denuncian no puede ser cierto".
Mientras tanto, Manzuelos y Gómez también se mostraron muy angustiadas y nerviosas. "Yo vine a escrachar al jardín y a pedir justicia para que las personas sean juzgadas por lo que le hicieron a mi hija", explicó entre lágrimas Valeria Gómez, mientras era increpada por los padres que defendían al jardín.
"¿Por qué vamos a mentir? ¿Qué podríamos ganar con esto? Nos discriminan porque nosotros somos peruanos. Nos duele que no nos crean", afirmó Gina Huarcaya, vecina de Manzuelos, quien estaba allí para apoyarla.
Andrea, prima de Valeria Gómez, coincidió en que era un tema de discriminación: "Como no somos de capital, somos de Don Torcuato, no nos creen, nos preguntan si no será que esto ocurrió en nuestras casas".
Junto con los muchos padres que se mostraron enojados con las denunciantes, y los familiares y amigos de Gómez y Manzuelos que las defendían, había otros padres que manifestaron absoluto desconcierto y descreimiento ante lo que estaba sucediendo en la puerta del establecimiento.
"Estoy azorada... todo era normal acá, el colegio es muy abierto, tienen medidas de seguridad, estaba súper recomendado... no entiendo nada. Que se investigue, pero que se termine este circo", manifestó otra madre visiblemente afectada. Mientras tanto, una chica del secundario intentaba atravesar la improvisada y caótica conferencia de prensa con su hermano. "¡Cuidalo, no lo traigas más acá!", la increparon, delante del chico, quien estaba apunto de largarse a llorar.
Otra denuncia de abuso
El juez en lo penal N° 5 de Quilmes, Julián Bustelo, ordenó liberar a la docente Cinthia Vera, acusada de haber abusado sexualmente de una niña de tres años dentro del jardín de infantes donde daba clases en el partido bonaerense de Florencio Varela. Según informaron fuentes judiciales a la agencia Télam, los voceros aseguraron que "no existen las pruebas suficientes para mantener en prisión a la docente", de 27 años, pese a que la fiscal Roxana Giménez había pedido su detención, acusada de abuso sexual agravado con corrupción de menores. Evaluaron que la maestra, que realizaba una suplencia de tres semanas, "no se iba a profugar ni a interferir en la investigación".