Prisión perpetua para los asesinos de Matías Terrón

Prisión perpetua para los asesinos. Eso era lo que añoraban los familiares de Matías Terrón, asesinado a sangre fría hace dos años, en Avellaneda. Porque los allegados de este joven de 31 años que, cuando fue ejecutado, acababa de saber que sería padre, aunque nunca llegaría a conocer a su hijo, no querían que otra familia tuviera que transitar por el mismo sufrimiento que ellos si los homicidas quedaban libres por algún beneficio. Es que los hermanos que mataron a Matías gozaban de libertad condicional y tenían varios antecedentes en su haber.

"No matan a más nadie", dijo, con cierto aire de alivio, Emmanuel Terrón, uno de los hermanos de la víctima, apenas conoció la condena. Su cuñada, en tanto, repetía: "Estoy tan emocionada".

Una semana atrás, los jueces Beatriz López Moyano, Roberto Conti y Roberto Lugones, del Tribunal Oral N°7 de Lomas de Zamora, dieron su veredicto unánime: Esteban y Daniel De Luca eran culpables del homicidio de Terrón. La difusión de los fundamentos de esa sentencia se prorrogó hasta este mediodía. "No entiendo por qué lo hicieron. Pasamos unas malas semanas, con mucho estrés y nervios", dijo a LA NACIÓN, al finalizar aquella jornada, Jésica Grasso, la viuda de Matías. Tener cara a cara a los asesinos de su marido no había sido fácil ni para ella ni para el resto de los seres queridos de la víctima. Escuchar que uno de los delincuentes pedía "justicia" los había indignado.

Matías fue secuestrado y asesinado la noche del miércoles 22 de junio de 2016, pocos días después de haberse enterado de que sería padre . "¡Dios, mi hijo! ¡Dios, mi hijo!", repitió desesperado segundos antes de ser acribillado por la espalda. Hoy, Benjamín, que ya tiene un año y medio, solo conoce a su padre por fotos y por los recuerdos que le transmiten su mamá, sus tíos y su abuela.