Procesan al cabo que baleó a una joven madre en la cabeza
La Justicia de Santiago del Estero dictó la prisión preventiva del policía acusado de matar de un tiro en la cabeza a una adolescente de 17 años, madre de dos hijos, durante un operativo en la capital de la provincia. El cabo 1° José Miguel Abraham quedó acusado del delito de homicidio calificado por su condición de funcionario policial en perjuicio de Silvia Verónica Maldonado.
Fuentes judiciales informaron a la agencia de noticias Télam que la fiscal Erika Leguizamón solicitó la prisión preventiva al sostener que la prueba química de rodizonato de sodio -usada para buscar rastros de un disparo de arma de fuego- dio positivo en las muestras tomadas al cabo Abraham. Resaltó que también fue coincidente el cotejo realizado por los peritos de la Gendarmería entre la vaina servida secuestrada en la escena del crimen y el arma reglamentaria del acusado.
En su descargo, el policía, asistido por los abogados defensores Horacio Patto y Dalmiro Cruz, indicó que había utilizado el arma reglamentaria "cuando se trabó la Itaka con balas de goma". Sin embargo, la fiscal insistió en que los peritajes balísticos demostraron que esas armas funcionaban correctamente.
Por su parte, la fiscal señaló que las dos hermanas menores de la víctima, que declararon en Cámara Gesell, reconocieron al suboficial Abraham como el autor del disparo, dijeron los informantes.
Luego de escuchar los argumentos de las partes, la jueza de Garantías y Control Ana Cecilia Vittar ordenó la prisión preventiva del cabo Abraham y en el mismo fallo dispuso la excarcelación de otros siete policías que estaban detenidos desde que ocurrió el hecho.
Los efectivos liberados son Ramón Mansilla, Juan Carlos Chávez, Fabio Cristian Cooper, Pedro Agustín Barraza, José Ramón Revaneira, Analía Gigena y Cristian Hernán Bravo, quienes quedaron imputados de "abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público".
El crimen de Maldonado ocurrió la noche del pasado domingo 16, cuando la víctima se negó a que una brigada de policías ingresara sin autorización judicial en su casa, situada en Teodoro Fells 1819, del barrio Gas del Estado, por el robo de una amoladora y una soldadora a la vecina Alejandra Rodríguez.
En esas circunstancias, y cuando Maldonado se encontraba parada en la puerta de su domicilio, recibió un balazo en la cabeza que le provocó muerte cerebral y, horas más tarde, su deceso en el Hospital Regional Ramón Carrillo, de la capital santiagueña.
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