Un oficial bonaerense murió baleado en la cabeza tras una discusión

Un oficial de la policía bonaerense fue asesinado de un tiro en la cabeza tras discutir con una pareja frente a una plaza de la localidad de Billinghurst, en San Martín.

Se trata de Fernando Ezequiel Palavecino, de 26 años, quien prestaba servicios en la Unidad de Policía de Prevención Local (UPPL) de Tres Febrero y ayer a las 3.45 fue baleado en la esquina de Primera Junta y Rivadavia.

Según indicaron fuentes policiales y judiciales a la agencia de noticias Télam, a la madrugada Palavecino se encontraba de franco y vestido de civil, acompañado por una mujer -que también presta servicios en la UPPL de Tres Febrero- y otro hombre en un Chevrolet Onix que estaba estacionado junto al cordón de la vereda, frente a la plaza principal de la localidad de Billinghurst.

Según lo que se pudo observar en las imágenes de una cámara de seguridad del lugar, estas tres personas charlaban cuando un Fiat Palio azul grisáceo se detuvo justo en la esquina y del coche descendió una pareja.

En esas circunstancias, esta pareja se acercó a las otras tres personas y mantuvieron una discusión; acto seguido, los ocupantes del Fiat Palio abandonaron el lugar.

Sin embargo, minutos después, este auto regresó hasta donde se encontraba Palavecino y un hombre que descendió del vehículo extrajo un arma de fuego y disparó contra el policía, que recibió un tiro en la cabeza; en tanto, sus dos acompañantes resultaron ilesos, dijeron los informantes.

Al cabo del ataque, el oficial baleado quedó tendido a mitad de la calle sobre un charco de sangre, en tanto que el agresor escapó en el mismo Fiat Palio en el que había llegado a la escena del crimen.

Las fuentes consultadas por Télam señalaron que Palavecino fue trasladado de urgencia al Hospital Interzonal General de Agudos Eva Perón (ex Castex), de San Martín, donde murió poco después a raíz de las heridas sufridas.

Por su parte, la mujer policía que acompañaba a Palavecino en el momento del ataque se encontraba al cierre de esta edición en estado de shock, por lo que aún no había podido declarar sobre lo ocurrido ante los investigadores, al igual que el otro hombre que estaba con ellos en el Chevrolet Onix.

La principal hipótesis que manejan los pesquisas apunta a que los agresores conocían a la víctima y a sus acompañantes, por lo que el móvil del crimen podría estar motivado por una cuestión personal, añadieron los voceros.

De hecho, los investigadores ya cuentan con pistas firmes sobre la identidad de la pareja que se movilizaba en el Fiat Palio, por lo que al cierre de esta edición eran intensamente buscados por la Policía.

En tanto, los peritos secuestraron en la escena del crimen la pistola reglamentaria de Palavecino, que quedó tirada a unos dos metros de él, en el piso y sin haber sido disparada por la víctima.

Las fuentes del caso señalaron que en el lugar se incautaron, además, dos vainas servidas calibre 11.25, el Onix y el celular de la víctima, que también quedó tirado sobre el asfalto cerca de la pistola y del propio oficial baleado.

El hecho, caratulado como "homicidio agravado por el uso de arma de fuego", es investigado por el fiscal Fabio Cardigonde, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°7 del Departamento Judicial San Martín, quien solicitó el relevamiento de las cámaras de seguridad de la zona y la toma de testimonios para intentar localizar a los agresores.

El fiscal también aguardaba para las próximas horas los resultados de la autopsia al cuerpo de Palavecino, cuyo crimen generó consternación entre sus compañeros de la fuerza que prestan servicio en distintas dependencias policiales de la zona.