En La Plata un policía baleó a cuatro mujeres: su expareja, una vecina, su exsuegra y una menor
Un policía bonaerense hirió a su expareja, a la madre, a una vecina y a una niña de 12 años en un raid violento en el que atacó a balazos el frente de dos casas de La Plata, tras lo cual se escapó. Horas después, se entregó en una comisaría de la zona y quedó detenido.
Las víctimas sufrieron lesiones leves y fueron trasladadas en ambulancias del SAME a centros asistenciales platenses. En tanto, Maximiliano Godoy, de 27 años, oficial de la Unidad Táctica Operativa de Infantería (UTOI) de La Matanza, quedó a disposición del fiscal de La Plata Álvaro Garganta, quien lo indagará hoy.
El episodio comenzó anteanoche a las 21, cuando Godoy fue en su Chevrolet Corsa a la casa de su expareja, situada en la calle 83, entre 12 y 12 bis, y efectuó ocho balazos contra el frente del edificio.
Como consecuencia de los disparos resultaron heridas la expareja de Godoy Sabrina Belmonte, de 27 años, y una vecina, Lara Zacariño, de 29, quien recibió un tiro cuando, al oír gritos, salió a la calle a ver qué sucedía.
Según explicaron las fuentes del caso, tras ese ataque, Godoy fue hasta la casa de la madre de su ex, en la calle 72, entre 2 y 3. Su lluvia de disparos alcanzó, esta vez, a Maira González, de 47 años y madre de Belmonte, y a una niña de 12 años que estaba en la casa.
Allegados a la familia de las víctimas afirmaron que Godoy había planeado el ataque contra su expareja y su familia.
Este lunes a la madrugada, varias horas después de los ataques, el policía se entregó en la comisaría 8» de La Plata, mientras que su Corsa blanco fue hallado abandonado cerca de su domicilio, en las calles 519 y 167, de Melchor Romero, con el capot incendiado.
Al entregarse a la policía, Godoy entregó su arma reglamentaria, una pistola Bersa Thunder Pro calibre 9 milímetros, y un cargador con cinco proyectiles.
En tanto, de manera inmediata, la Auditoría de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense dispuso desafectar de la fuerza al oficial imputado.
Al cierre de esta edición, Belmonte -que recibió una herida de bala en la mano y otra en el muslo- y González (herida de bala en la clavícula) permanecían internadas, fuera de peligro, en el área de emergencias del Hospital San Martín, de La Plata.
La menor, que recibió una herida de bala en la pantorrilla, recibió el alta al cabo de una serie de curaciones que le efectuaron en el Hospital de Niños Sor María Ludovica. En tanto, la vecina Lara Zacariño, que sufrió un roce de bala en la pierna derecha, fue atendida en otro centro asistencial y dada de alta este lunes.
El fiscal Garganta explicó a la agencia Télam que "el caso se encuentra en plena etapa de investigación" y que debido "a la gravedad del hecho y a la conmoción generada por el ataque se demoró la recepción de testimoniales".
"Una vez obtenida la secuencia completa vamos a decidir el temperamento a adoptar. En principio son lesiones graves, quedando a la espera la recepción de pruebas testimoniales", dijo el fiscal, que no descartó la posibilidad de acusar al policía Godoy por el delito de "tentativa de femicidio".
Durante la tarde del lunes, el fiscal mantuvo un primer contacto con cada una de las víctimas, pero todas ofrecieron una breve declaración, ya que se hallaban en un fuerte estado de shock por lo que habían vivido horas antes.
La sospecha de los investigadores es que el policía atacó el frente de la casa de su expareja porque ella había resuelto poner fin de manera definitiva a la relación que los unía, aparentemente porque existían antecedentes de violencia de género.
En ese sentido, el fiscal Garganta señaló: "En principio no hay constancia de que tenga una denuncia de violencia previa". Agregó que la condición de policía de Godoy es un agravante, lo mismo que la cuestión de género.
Al respecto, Néstor Belmonte, padre de la joven herida, afirmó a la prensa que el agresor "quiso matar" a las víctimas y remarcó que "disparó ocho tiros a la altura de la cabeza y el pecho" de su hija.
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