Acto por las víctimas del tirador de Cabildo
Para recordar a Alfredo Marcenac, víctima mortal del ataque a balazos contra transeúntes ocurrido el 6 de julio pasado en Cabildo al 1700, familiares y amigos del estudiante necochense fallecido pintaron un mural en la cuadra de la masacre atribuida a Martín Ríos, que está detenido y es actualmente sometido a estudios psiquiátricos.
Tras este homenaje, los deudos anunciaron que el próximo viernes realizarán una marcha para pedir justicia en este caso.
Manos convertidas en palomas blancas fue la imagen que eligieron los allegados a Alfredo para repudiar la violencia armada. La concreción de su idea, sin embargo, los obligó a realizar varios trámites y reclamos oficiales.
"Parece increíble que para que muera una persona sea todo tan simple y después para hacerle un homenaje sea tan complicado. ¡Qué perversas resultan las cosas! A los ciudadanos que confían, como nosotros, en que las cosas pueden ser mejores, les pedimos que nos acompañen el próximo 25 a una conmemoración, aquí [Cabildo al 1700], para mostrar a toda la sociedad que no todos somos iguales", dijo Mónica Boyssebes, la madre de la víctima mortal del hecho.
Adrián Marcenac, el padre, pidió que se impulse la seguridad para los argentinos "sin violencia", y aclaró que está conformes con la actuación de la Justicia.
Más estudios
Ríos será sometido esta semana a nuevos estudios en el hospital neuropsiquiátrico Borda con el fin de esclarecer su estado de salud mental. El principal análisis previsto es un electroencefalograma que permitirá sumar indicios a la hora de evaluar su mapa cerebral.
Mientras, su defensa espera que la Cámara del Crimen revierta los procesamientos que pesan sobre Ríos, por homicidio agravado y lesiones. Está acusado de haber disparado sin control en cuatro ocasiones: contra un bar, donde hirió a una chica, y contra colectivos y trenes en movimiento.
La Sala IV de la Cámara del Crimen porteña, integrada por los jueces Carlos González, Mariano González Palazzo y María Laura Garrigós de Rébori, ya estudia las pruebas contra Ríos, acusado por la jueza María Fontbona de Pombo de haber asesinado a balazos "por placer" a Marcenac y de haber herido en ese hecho a otras seis personas.
La defensa de Ríos posteriormente cuestionó los indicios que llevaron a Fontbona de Pombo a sostener que el acusado "salió a matar por sentir el gozo y disfrute de matar".
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