Air Comet: incertidumbre entre pasajeros varados
MADRID.- El cimbronazo producido por el colapso de Air Comet, la línea aérea del grupo Marsans que operaba en conjunto con Aerolíneas Argentinas, comenzó a sentirse ayer no sólo en las entrañas del grupo, sino también en el gobierno español y, especialmente, entre los cerca de 800 pasajeros varados de distintos vuelos que se toparon con más dudas que certezas en el aeropuerto madrileño de Barajas.
Por los numerosos reclamos ante el personal de la aerolínea, cuyos 640 empleados serían despedidos de no mediar un recurso extraordinario por parte de las autoridades españolas, las personas que deseaban viajar sólo obtuvieron de Marsans mensajes esquivos y promesas de comunicados nunca concretadas.
El cese de las operaciones de Air Comet afectó ayer a un numeroso grupo de argentinos que debía abordar el primer vuelo programado hacia Buenos Aires desde el comienzo de la crisis terminal de la empresa. Aunque la cantidad de pasajeros afectados por la anunciada quiebra de la compañía es aún incierta, según fuentes del consulado argentino consultadas por LA NACION, ese número, hasta ayer estimado en cerca de 300 personas, podría "multiplicarse" después del Año Nuevo, ya que la mayoría de los argentinos residentes en Europa que compraron pasajes de ida y vuelta con motivo de las Fiestas ya se encuentran en la Argentina y deberían regresar a Madrid en la primera quincena del mes próximo.
En caso de verse afectado por la medida, envíe su testimonio a
Si bien el total de argentinos que habrían quedado varados sólo se conocería en los próximos días, el precedente de la quiebra de Air Madrid, que en 2006 dejó a más de 5500 argentinos en tierra, no es alentador.
Esteban Colombo, ingeniero industrial porteño residente en Madrid, debía viajar ayer junto con su familia para pasar las Fiestas junto con sus padres, pero desde la empresa sólo recibió el consejo de formalizar la queja en una planilla y esperar una respuesta en un plazo no definido. "Para peor, cuando fui a la delegación comercial, que queda fuera del aeropuerto, era imposible entrar por la cantidad de gente que había y, además, se habían acabado los formularios", dijo indignado.
Cánticos futboleros
Por su parte, Manuel Texeira, un hincha de Estudiantes de La Plata que debía viajar en el mismo vuelo que Colombo junto con otra treintena de simpatizantes platenses después de presenciar la derrota de su equipo en la final del mundial de clubes en Abu Dhabi, también dijo sentirse defraudado y sin saber qué hacer.
"No hay nadie a quién reclamarle. Nuestras familias nos están esperando, pero creo que vamos a pasar la Navidad acá", dijo, para unirse poco después a sus compañeros en la entonación de largos cánticos de protesta en contra de Marsans, que fueron interrumpidos por el personal policial del aeropuerto en varias oportunidades.
Uno de los compañeros de hinchada de Texeira también se quejó de no haber recibido ayuda por parte del consulado argentino en Madrid. "Vinimos acá y la empresa estaba quebrada. Hablamos con el consulado, y nos dijeron que estaban fundidos y no podían ayudarnos. Ya no sabemos qué hacer", dijo .
Al ser consultado por LA NACION, una alta fuente diplomática argentina explicó: "A estas alturas del ejercicio [contable], el consulado no tiene fondos. Desde nuestro lugar, estamos trabajando desde el primer minuto de hoy [por ayer] para hacer todas las gestiones necesarias". La misma fuente indicó que por ahora, la única novedad la aportó el Ministerio de Fomento español, que prometió ubicar a los pasajeros varados en dos aviones chárter que partirán a Buenos Aires entre hoy y el viernes, día de Navidad.