Tras arduas negociaciones. Aprobaron la integración del Tribunal Superior
El postulante más resistido fue Guillermo Muñoz, quien desempeñó tareas de asesor en el último gobierno militar
La Legislatura porteña aprobó ayer la designación de los cinco miembros del Tribunal Superior de Justicia de la ciudad que había propuesto el Poder Ejecutivo local, incluido el juez Guillermo Muñoz, que fue cuestionado por distintas agrupaciones de derechos humanos, políticos y profesionales por haber tenido un cargo durante el último régimen militar.
La sesión, marcada por las interrupciones, estuvo al filo del fracaso. Los jueces necesitaban el acuerdo de dos tercios del cuerpo, para lo cual era preciso el sí de la UCR, del Frepaso y del justicialismo, ya que Nueva Dirigencia (ND) anunció desde el principio su oposición. Costó medio día de negociaciones que la totalidad de los frepasistas y justicialistas se decidieran a acompañar a los radicales en la votación.
Así, el jefe de gobierno, Fernando de la Rúa, evitó pagar el alto costo político que habría significado el rechazo de sus candidatos, algo que sí ocurrió en abril último, cuando la Alianza no pudo imponer, en circunstancias similares, a Norberto La Porta en la Defensoría del Pueblo.
La Corte porteña quedó integrada por Muñoz, José Osvaldo Casás, Ana María Conde, Julio Maier y Alicia Ruiz. El órgano judicial sólo tendrá facultad de intervenir en causas contravencionales, hasta tanto se conforme el fuero contencioso administrativo y se transfiera a la ciudad el resto de los tribunales ordinarios.
Pese a que sólo votaron en contra los 11 diputados de ND, los legisladores del PJ, por medio del presidente del bloque, Guillermo Oliveri, señalaron que el tribunal elegido "está formado por jueces afines a De laRúa". Además, siete frepasistas dejaron sentado en la sesión que hubieran preferido investigar más los antecedentes de los candidatos antes de votar.
Al borde del traspié
La sesión especial para nombrar a los postulantes se inició a las 14. El acuerdo que habían alcanzado las fuerzas políticas parecía quebrado. Se pidió un cuarto intermedio de dos horas y los bloques se retiraron a deliberar.
Horas antes de la sesión había llegado una carta del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal dirigida a los presidentes de los bloques en la que el organismo consideró "inconveniente" la incorporación al tribunal de Muñoz, Conde y Maier, porque fueron jueces durante la dictadura militar.
Ese escrito aumentó las dudas de muchos de los diputados frepasistas, especialmente en lo que se refería a dar acuerdo a Muñoz. Sólo cuatro horas después el bloque definió su postura, tras una votación interna, en la que ganó el sí por 11 contra 7.
Postulación discutida
Muñoz, actual camarista en lo contencioso administrativo, fue el único de los cinco integrantes del tribunal que recibió impugnaciones en su contra -realizadas por ND- durante la audiencia celebrada el miércoles último. La controversia por la postulación de Muñoz -que fue asesor del Ministerio de Justicia durante el último régimen militar- comenzó hace más de un mes, cuando los legisladores descubrieron que en el currículum del juez que había llegado a la Legislatura faltaban sus antecedentes de los años del Proceso.
Cuando el Frepaso definió su posición, los justicialistas decidieron no entrar a votar, con lo que condenaban al fracaso la designación de los jueces. Pedían que se votara la semana próxima, porque consideraban inapropiado que no estuviera presente el jefe del bloque del Frepaso, Raúl Zaffaroni, que estaba de viaje en Formosa.
Después de dos horas de tratativas, el bloque peronista ingresó en el recinto. Fuentes consultadas aseguraron que el acuerdo entre el PJy la Alianza incluye, entre otros puntos, la cesión de la titularidad de la Auditoría General de la ciudad a un justicialista a cambio de sus 10 votos para el tribunal.
La votación, que se concretó cerca de las 23, dejó cicatrices dentro de la Alianza, ya que el Frepaso, según fuentes inobjetables, quedó muy molesto por lo difícil que fue lograr el acuerdo, que había sido negociado directamente por el secretario de Gobierno porteño, Enrique Mathov.
"Decidimos dar el sí para que la ciudad no se quede sin tribunal. Pero igual cuestionamos a los jueces porque cuatro de cinco son de afiliación radical y otra, allegada al Frepaso", indicó Oliveri.
Enrique Rodríguez, jefe de la bancada de Nueva Dirigencia, calificó a la Corte de "adicta a De la Rúa" y "fruto de una negociación turbia entre la Alianza y el justicialismo".
En tanto, la titular del bloque radical, Gabriela González Gass, defendió a Muñoz y aseguró que con este tribunal "se garantiza la independencia de la justicia porteña".
Desde el Frepaso, hubo un grupo -encabezado por Abel Fatala- que se pronunció favorablemente a los postulantes. Otra división pretendía posponer la votación para investigar aún más los antecedentes de Muñoz, tal como señaló el diputado Eduardo Jozami.
Quiénes son
- Guillermo Muñoz (56 años): actual camarista en lo contencioso administrativo. Fue asesor del Ministerio de Justicia durante el último régimen militar.
- José O. Casás (56 años): es docente universitario. Fue funcionario del gobierno de Raúl Alfonsín.
- Ana María Conde (58 años): es jueza de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil.
- Julio Maier (59 años): ex juez en lo criminal. Es titular de tres cátedras en la UBA.
- Alicia Ruiz (53 años): fue docente y es jueza en lo laboral desde 1987.