Capitanich pediría la renuncia a su esposa

La ministra de Salud del Chaco, Sandra Mendoza, se convertiría en la primera víctima política del dengue. Ayer, eran insistentes los rumores sobre que la ministra, esposa del gobernador Jorge Capitanich, sería echada del cargo por una serie de desinteligencias en el combate de la enfermedad y las recurrentes disputas con su marido. De continuar, mañana debería enfrentar una interpelación por parte de los diputados provinciales.

De todos modos, para Capitanich, uno de los políticos con aspiraciones nacionales, representa un duro golpe porque se ve obligado a reclamar la dimisión a Mendoza en medio de una crisis.

Incluso, ayer hubo rumores de que la esposa de Capitanich no había aceptado el pedido de renuncia y que se había encerrado en el Ministerio de Salud. No sería la primera vez que protagoniza episodios altisonantes dado que hace dos meses, supuestamente luego de una pelea con su marido, chocó fuera de control a varios autos en un estacionamiento oficial. Más tarde, viajó a Buenos Aires, aparentemente para iniciar un tratamiento que fue interrrumpido por la epidemia de dengue.

Sandra Mendoza fue siempre polémica hasta con sus pares en la Cámara de Diputados provincial. Tuvo entredichos con insultos con la diputada Marita Barrios, cuando le reprochó su ausencia en una reunión de la Comisión de Salud. También protagonizó otro escándalo durante una interpelación en la que fue empujada por manifestantes.