Adelanto Comercio exterior. Con el ritmo del caracol
A través de Slow Food, más de 100 pequeños productores argentinos viajarán a Italia a un encuentro con sus pares de todo el mundo. Su misión es rescatar del olvido a los cultivos históricos, los primeros, de nuestro país. En medio de tentadoras exquisiteces ofrecidas por decenas de países de todo el mundo la Argentina se distinguirá otra vez en el Salón del Gusto, una exposición de alimentos de alta calidad organizada por Slow Food, con tres sabores bien autóctonos: el yacón, las papas y los maíces andinos. Entre el 26 y 30 de octubre próximo arribarán a Turín de la mano de sus productores –más de 100 que también asistirán al foro Terra Madre– para ser exhibidos, probados y comercializados en la muestra bianual organizada por el movimiento que creó Carlo Petrini en Italia como contrapartida a la cultura de las comidas rápidas y homogeneizadas. Por citar un caso: al pie de la Quebrada de Humauaca, en el pueblo de Chorrillos-Bárcena, habitado por 200 familias originarias de la zona, el yacón –una raíz andina dulce que puede comerse cruda o preparada en dulces, ensaladas, escabeches, panes y otras recetas– era el cultivo predominante hasta que el tren dejó de pasar por allí y no acercó más a sus habituales compradores.
"Como ya no se sembraba se estaba perdiendo la semilla. Y fue algo mágico encontrar a la ingeniera (Magui Choque Vilca, coordinadora del Baluarte) porque nos incentivó para volver a sembrarlo y para ver qué podíamos hacer con el yacón. Hasta hace 6 años lo cultivaban sólo 5 productores que fueron pasando las semillas y hoy somos 40 los que formamos la Cooperativa de Trabajo Agroganadera, Agroalimentaria y Artesanal Portal del Patrimonio y que estamos trabajando para agrandar y mejorar nuestros sembrados familiares y los productos elaborados con el yacón", expresa Susana Martínez, presidenta de la cooperativa.