Derivaciones de la guerra de la basura
Hasta ayer todo parecía resuelto, pero un nuevo capítulo comienza en la guerra por la basura, que involucra a varios municipios del conurbano bonaerense.
A pesar de que el nuevo director de la Coordinación Ecológica Metropolitana Sociedad del Estado (Ceamse), Carlos Hurst, sostiene que su gestión intentará "conciliar" con todos los intendentes, el camino no se le hará sencillo.
Es que ayer asomó un nuevo protagonista: el intendente de La Matanza, Alberto Balestrini. "La Matanza no acepta recibir residuos de otros distritos, además de los que viene recibiendo desde hace 20 años", dijo, en respuesta a la decisión de la Ceamse de enviar allí provisionalmente parte de las dos mil toneladas de basura de los municipios del sur bonaerense.
La iniciativa de utilizar los rellenos sanitarios de González Catán y de San Martín fue tomada por Hurst ante el conflicto que el organismo tiene con el municipio de Quilmes. Es que a pesar del fallo favorable de la Cámara para que la Ceamse utilice el relleno quilmeño "durante el plazo de diez días", el ente continuará con su plan de emergencia.
Para Balestrini, no es posible ni siquiera en forma provisional sacar el problema de un lado para ponerlo en otro. Aseguró: "Los vecinos matanceros estamos cansados de que se tomen decisiones sobre nuestro futuro sin consultarnos, como si todavía estuviéramos en tiempos de dictadura".
"Los municipios que somos directamente afectados no fuimos consultados, y debemos serlo hasta para encontrar soluciones transitorias, porque -acotó Balestrini- para La Matanza esta situación que nos quieren imponer significa un desfile diario de camiones por el centro de González Catán." Y puso como ejemplo la calle Scarlatti, que conduce al relleno y "que ya está destruida".
Silvia Pose, abogada de la municipalidad de Quilmes, destacó que "la resolución dictada por la cámara sentó un precedente. Sólo pueden utilizar el relleno durante diez días y tienen que ajustarse a los términos de la ley 25.675, de medio ambiente, que hasta la fecha Ceamse siempre ignoró".
Mientras la guerra continúa, los únicos que sienten haber ganado una batalla son los ciudadanos de Avellaneda. Es que anteayer quedó cerrado definitivamente el relleno sanitario de Villa Dominico y miles de vecinos organizaron una caravana de festejo que culminó en el centro polideportivo de la ciudad. Hurst continúa reuniéndose con los jefes comunales para llegar a un acuerdo, por lo menos hasta que la propuesta del gobernador bonaerense, Felipe Solá, de crear un nuevo ente, tenga visos de realidad.