Leer también ayuda a los enfermos

"Donar sangre es darle a otro la oportunidad de salvarse la vida", asegura Silvia Arreghini. Ella lo afirma con una gran convicción y, además, hace 8 años que lo predica con su ejemplo. Todo surgió en 2005. Mientras Silvia miraba televisión le llamó la atención un anuncio en el que se solicitaban, con urgencia, voluntarios dadores de sangre. Abrió la guía de teléfonos y eligió al azar un lugar cercano a su casa para responder a este pedido. Recorrió el listado hasta detenerse en el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez: el que hoy es prácticamente su segundo hogar.

Al poco tiempo, fundó la Asociación Civil Dale Vida, que informa y alienta a las personas a convertirse en donantes voluntarios de sangre. "De tanto venir acá empecé a darme cuenta de que detrás de un chico que necesita sangre hay una mamá o un papá desesperado buscando donantes. También reparé en que hay muchas mamás que vienen del interior, y se sienten solas. Entonces me pregunté: ¿qué más podemos hacer por estos chicos?", recuerda.

La respuesta a esta pregunta dio nacimiento al programa Leyendo Juntos, mediante el cual un grupo de voluntarios les leen cuentos a los chicos internados en el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez. Tres veces por semana cumplen con una valiosa tarea: acercarles a los pequeños pacientes la magia de la lectura en buena compañía. Los 40 voluntarios –cuyas edades varían desde los 17 hasta los 82 años– se comprometen con la actividad y tienen la camiseta puesta porque saben que, del otro lado, hay alguien que los espera.

"Lo que siempre les recuerdo a los voluntarios es que nosotros no venimos a ver enfermedades, venimos a ver a los chicos. Por eso, lo que podemos hacer por ellos es leerles, despertarles la sensibilidad, la creatividad, las ganas de disfrutar de un cuento, de un dibujo o de una pintura. Queremos compartir juntos parte de nuestra vida, de nuestro tiempo, de nuestros saberes y estamos para acompañarlos", explica la coordinadora de Dale Vida.

Caperucita Roja, Los tres cerditos, Don Quijote… son algunos de los miles de libros que componen la biblioteca del hospital y que sirven para dibujar sonrisas entre los niños y adolescentes. Antes de recorrer las habitaciones, los voluntarios de Leyendo Juntos toman una bolsa y ponen allí los cuentos seleccionados según la edad del paciente que visitarán ese día. Para entretener a los chicos también pueden agregar títeres, hojas de colores, actividades recreativas, lápices y juguetes.

Entre los colaboradores de esta iniciativa se encuentra Rosa, de 72 años. A pesar de caminar con un andador –por un problema en su columna–, nada la detiene. "Es mucho lo que aquí recibo… La sonrisa de un chico no tiene precio. Después de la actividad llego a casa y pienso: ¿de qué me quejo?", cuenta. Y agrega: "Los niños se enganchan con la lectura, con los rompecabezas, con los juegos, y me preguntan: «¿Vas a venir mañana?»".

El 1° de septiembre Dale Vida organiza su 4a maratón anual para recaudar fondos. Quienes estén interesados en participar pueden ingresar en www.dalevida.org.ar . Para colaborar con la donación de libros de cuentos y juguetes pequeños (en muy buen estado); revistas con actividades recreativas, material de librería y televisores 14 pulgadas para las habitaciones de los niños, pueden contactarse a dalevida@fibertel.com.ar o comunicarse por teléfono con Silvia al (011) 154-998-8271.