Tenía 19 años. Mataron a una joven en Pilar

Estaba desaparecida desde el domingo; su cuerpo fue hallado por una vecina

26 de diciembre de 2002

Una joven de 19 años fue encontrada muerta anteayer con signos de haber sido golpeada en un barrio de la ciudad de Pilar, dijeron fuentes policiales.

El cuerpo estaba dentro de un caño de cemento que cruza la calle Bernardo Houssay al 400, a muy pocos metros de su casa, en el barrio San Alejo, de esa ciudad situada al norte del Gran Buenos Aires.

La víctima fue identificada como Miriam Rosa Gutiérrez, madre de una nena de tres años e hija de un ex combatiente de Malvinas, quien estaba desaparecida desde el domingo último, según precisaron sus familiares.

El cadáver fue hallado poco después de las 8 de anteayer por una vecina del barrio que llevaba a pastar una yegua a un potrero de las inmediaciones.

La mujer avisó a la policía y el cuerpo fue trasladado por los bomberos a la morgue judicial para que se le realizara la autopsia de práctica.

Según dijeron vecinos y familiares, el padre de la víctima es Rubén Gutiérrez, un ex combatiente de la guerra de las islas Malvinas y la madre es Olga Leguizamón, de 38 años.

La causa está caratulada como homicidio y la investigación está a cargo del fiscal de Pilar Diego Molina Pico.

Las causas

Al ser consultado, el subcomisario Angel Becerra informó a LA NACION que “el cuerpo estaba muy sucio con barro y agua, por eso sólo se pudo determinar a simple vista que el cadáver tenía un golpe sangrante arriba del arco superciliar derecho y equimosis en el cuello, también marcas en el brazo derecho, evidencia de que fue agarrada con fuerza”.

Además, explicó que no se podía señalar la causa de la muerte hasta contar con los resultados de la autopsia.

“La familia realizó la denuncia el lunes a la 1 de la madrugada. Desde ese momento comenzaron los interrogatorios y continúan, aunque por el momento no hay detenidos. En el marco de la investigación, debemos determinar qué clase de vida llevaba la víctima para reconstruir los últimos días de vida”, dijo Becerra.

Familiares de Miriam Gutiérrez dijeron que el autor del crimen habría sido un joven, padre de la hija de la víctima, con quien habían mantenido una tormentosa relación. Una mujer identificada como Graciela, tía de Miriam, dijo que el joven la golpeaba con frecuencia y la perseguía constantemente. Graciela dijo que “hay gente que asegura haber visto el domingo por la mañana, casi de madrugada, cómo le pegaba en el estómago y la sacaba a empujones del pool bailable en el que estaban”.

Algunos vecinos dijeron que alrededor de las 3.30 de la madrugada del martes escucharon ladridos de perros y a dos personas jóvenes que hablaban en el lugar donde cinco horas más tarde fue encontrado el cadáver.

En su declaración, el joven dijo que estuvo en el pool hasta las 6 y después se fue a su casa. La policía no lo detuvo, porque no se presentaron los supuestos testigos de la golpiza.

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