Mejora el chico que cayó desde un balcón

Al igual que en el caso de la familia de Zahira Morales, la madre del niño de seis años que cayó desde un balcón en un octavo piso, espera tenerlo pronto en casa. Se trata de Juan Carlos Arce, el pequeño que salvó milagrosamente su vida a pesar de haber caído desde más de 30 metros. Como consecuencia de ello, sólo sufrió escoriaciones, según informaron los médicos que lo atienden.

El hecho se produjo el lunes pasado, alrededor de las 20, en un edificio situadoe, Boedo 357, Almagro.

Según Rubén Schmidt, subcomisario de la comisaría 10a., el chico atravesó dos ramas de un árbol sobre la calle Quito que amortiguaron el golpe y quedó entre el capot de un Peugeot 505 y el baúl de un Torino, que el portero del edificio había estacionado allí.

El pequeño, que presentaba varios politraumatismos, fue asistido por el SAME, que lo trasladó al Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez.

Las autoridades médicas de ese centro de salud aclararon que "hay que esperar de 24 a 48 horas" por si surgen complicaciones, y que "es muy arriesgado" afirmar que está "fuera de peligro" debido al fuerte traumatismo padecido.

"Estaba lúcido cuando llegó al hospital: no tiene lesiones óseas ni fracturas, tampoco traumatismo de cráneo importante. Parece increíble, pero fue así", detalló Cristina Galoppo, directora del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez. Un nuevo parte médico sobre la evolución del niño será brindado hoy.

Según contó a la prensa el portero, José Llona, fue quien llamó a la ambulancia. Relató que escuchó un estruendo y que se asomó por la ventana para saber qué pasaba. "Vi el cuerpito de Juan Carlos acostado entre los autos. Toqué timbre en su casa para que viniera alguien y llamé al SAME", dijo. Juan Carlos estaba con Sofía, su hermana de cuatro años, en compañía de un adulto, dueño del departamento donde viven. El niño habría ido solo hasta el balcón, donde quedó colgado de los barrotes y luego cayó.

La policía procuraba establecer si se trató de un accidente.