"No queremos ser el basural de la ciudad de Buenos Aires"

"No queremos ser el basural de la Capital". Con esta frase respondió Alberto Pérez, el futuro jefe de Gabinete del gobernador bonaerense electo, Daniel Scioli, cuando LA NACION le preguntó sobre el futuro destino de la basura metropolitana.

Es que a fin de año se cerrarán dos de los tres rellenos sanitarios donde hoy se depositan 15.000 toneladas de residuos por día que se generan en la Capital y en el conurbano. Son los rellenos de Ensenada y de González Catán. Sólo quedará Norte III [en el partido de San Martín] y, desde principios de este año, la Capital ha aumentado el volumen de residuos. "Habrá que profundizar las políticas de reducción de desechos", dijo Pérez.

El equipo de medio ambiente conformado por Scioli estudia estrategias para abordar el añejo problema de la basura. "Trabajamos con un concepto de integralidad, centrado en la disminución de residuos, en separar en origen y en la recolección diferenciada", explicó Ana Corbi, coordinadora de esa mesa de trabajo.

"Lo que nosotros queremos es sentarnos a hablar del área geográfica que compartimos y tomar decisiones que sean sustentables ambiental, social, y económicamente", dijo y aclaró que para la disposición final de residuos no se descarta ningún sistema: "Todas las tecnologías tienen sus pros y sus contras. No queremos casarnos con ninguna", aclaró Corbi cuando se le preguntó por la posibilidad de incluir la incineración como técnica. Allegados del futuro gobierno de Mauricio Macri vienen analizando esa posibilidad, aunque ayer el jefe de gobierno no lo confirmó. Es más, varios de sus futuros funcionarios ya tomaron contacto en Europa con la técnica. Según pudo saber LA NACION, podrían inclinarse por el modelo de Barcelona, de "ecoparques", que utilizan métodos de compostaje (abono) y recuperación de energía. "El objetivo es cumplir con la ley de basura cero; que el 30% de los residuos sea reciclado es la mejor manera de bajar la contaminación", dijo Macri.

El ministro de Medio Ambiente, Juan Manuel Velasco, firmó una resolución por la que unos 11.000 grandes generadores de residuos (comercios, bancos, supermercados, restaurantes) deberán separar la basura en seca y húmeda. Será obligatorio cuando se publique en el Boletín Oficial.