Tenencia compartida: terminó mal la historia de la “heroína” española
Juana Rivas decidió dejar de correr; se presentó ante la Guardia Civil y entregó a los chicos para su restitución
Madrid.- Al final,todo salió mal para Juana Rivas. La madre granadina, que recogió aquí enorme apoyo tras haberse negado a cumplir el auto judicial que le ordenaba entregar a sus hijos al padre, desistió y terminó acatando la orden judicial.
Los dos pequeños, de 3 y 11 años, se encuentran ya con el padre, que no los veía hacía más de quince meses.
No sólo tuvo que acatar la orden sino que ahora Rivas enfrenta un pedido de prisión sin fianza y su entorno -familia y asesores legal y psicológico- serán investigados por posible “instigación” al delito.
Rivas se hizo sumamente popular cuando, semanas atrás, hizo público su caso en las redes sociales. En esencia, se negaba a acatar una disposición judicial que ordenaba reintegrar los hijos al padre, el italiano Francesco Arcuri.
Junto con sus hijos, la pareja tenía domicilio en la isla italiana de San Pietro, cercana a Cerdeña, donde explotaban un hotel rural.
En mayo del año pasado, Rivas regresó a Granada con los dos hijos y no volvió más a Italia. En medio, alegó que su ex pareja es un maltratador y que, incluso, tuvo una sentencia en 2009 por malos tratos.
La Justicia, sin embargo, entendió que había incurrido en secuestro de menores y que debía reintegrarlos. Ella insistió en que no hacía nada malo y que “jamás” los entregaría “a un maltratador”.
El caso se convirtió en un carbón ardiente. No hubo programa de televisión o portal en el que no se lo debatiera. Las redes sociales se volcaron a favor de la “madre valiente”.
Eso aumentó, incluso, cuando, el pasado 8, decidió darse a la fuga con los dos chicos y desconcertó a la policía de todo el país, que no pudo dar con ella. Era, el suyo, un expediente incómodo.
Hasta autoridades nacionales deslizaron su apoyo. “Hay que ponerse en el lugar de una madre”, dijo el presidente del gobierno ,Mariano Rajoy, en los primeros momentos del caso.
La Justicia se mantuvo en que Rivas debía aparecer y los chicos debían ser restituidos a Italia. La situación judicial de la madre se hacía cada vez más compleja.
Finalmente, hoy decidió dejar de correr. Se presentó ante la Guardia Civil y entregó a los chicos para su restitución.
“Los menores están tranquilos y con su padre”, dijo un comunicado de la defensa de Arcuri. Las derivaciones judiciales de todo lo ocurrido –de la fuga y del tiempo en que los menores estuvieron inhallables- comienza ahora.
El debate popular sigue en las redes. Aunque ahora, las opiniones parecen estar un poco más divididas y hay censura para quienes “asesoraron” a la ex madre en fuga.