En medio de un proceso donde la esterilización puede modificar su carácter, los felinos de los 3 a los 6 años se convierten en adultos y comienzan así una parte de su vida donde la vejez empieza a acechar.
A partir de los 7 hasta los 10 se deberán tener en cuenta varios estudios médicos para constatar su salud, en especial los dientes y colmillos.
Finalmente, a partir de los 11 años en adelante, el gato se puede considerar viejo. En este lapso, la mascota empieza a padecer algunas enfermedades relacionadas con la diabetes, como así también problemas en su pelaje, por lo que se recomienda, constantemente, utilizar su cepillo para renovar su pelo y así contribuir con el cuidado de su salud.