Brenda Abigail Altamirano tiene 10 años y sueña con ser veterinaria.
Va a la Escuela Albergue Nuestra Señora del Valle de la Fundación Manos Abiertas y vive con su familia en una casa en medio del campo a donde no llega el wifi.
Como no tienen Internet, durante la pandemia fue muy complicado para Brenda y Coqui seguir conectadas con la escuela. Los alumnos, los padres y los docentes hicieron un sacrificio enorme para comunicarse.
Analía Castillo Sosa, directora de la escuela
La principal necesidad de la familia en este momento es poder instalar una antena de Internet para poder seguir estudiando. Si pasa la tranquera y sube una montaña, Brenda puede conseguir algo de señal. A su casa no llega porque está en un bajo.
Jorge, papá de Brenda